Hoy estoy muy enfadada. No comprendo como una mujer puede sentir asco al tocar su cuerpo, más concretamente, su zona íntima.
Hace algunos meses que descubrí la copa menstrual, gracias a una maravillosa mujer a la que sigo en varias redes sociales.
Ella subió el siguiente video a Youtube:
En el instante que terminó el video, entré en la web que ella recomendaba y me compré una. Desde entonces he desterrado por completo el resto de métodos y no puedo estar más feliz.
Es muy fácil identificar que las que aman la copa son mujeres seguras de sí mismas, que conocen su cuerpo, sin complejos, sin prejuicios, sin tabús…
Sin embargo en el grupo de las que la odian, puedes encontrar comentarios como:
¿Y si se me mete para dentro y se me pierde?
Pero vamos a ver, alma de cántaro, ¿cómo se te va a perder la copa dentro de la vagina? Que eso tiene un tope, que no es un pozo sin fondo, no es la puerta a Mordor. No se va a perder. ¿No sabes cómo es tu cuerpo? ¿No tienes ni la más remota idea de lo que llevas entre las piernas?
Qué asco tener que introducir los dedos. Qué asco mancharme.
Es tu maldito cuerpo. ¿Cómo narices te duchas tú sin tocarte? ¿Asco mancharte? ¿Asco de algo natural?
¿Cómo vas al baño con la copa puesta?
¿En serio? Volvemos a lo de no conocer tu cuerpo.
Nos enseñan desde pequeñas que masturbarse está mal, que hay que esconder las compresas y los tampones para que no te los vean, que no hay que hablar de sexo ni de la menstruación…
Tengo que agradecer infinitamente a mi madre que nunca me educara así, que siempre me diera la libertad de hablar de todo con ella y me hiciera ver todo esto como realmente es, algo natural. También a mi instituto por las charlas de educación sexual que hacían cada año, las cuales pude aprovechar gracias a mi educación, no como la mayoría de mis compañeros/as que no se las tomaban enserio y lo único que escuchaban era “pene, vagina” y a echarse las risas.
Todo esto tiene que parar. Las mujeres de ahora son las que tienen que abrir los ojos, cambiar la mentalidad, y así educar a sus futuros hijos de otra forma. Y sí, está únicamente en manos de nosotras, porque si tú te avergüenzas das pie a la burla de otros. En cambio si tú lo ves como algo totalmente natural y estás segura de ti misma, por mucho que otros se rían o hagan comentarios de mal gusto, a ti te va a dar exactamente igual y no te va a afectar.