Amarillo Bobum, Susana Fiannaca

Bobum caminaba pensando en el amarillo. Ese día  el sol y los girasoles lo invadían. Se detuvo y la poesía que Yisán le regaló, navegó en el río de sus pensamientos.
De nuestros miedos nacen nuestros corajesy en nuestras dudasviven nuestras certezas
Tenía miedo  de equivocar su camino. El amarillo de un limón brilló en su mirada y su corazón sintió un coraje inédito.Unas nubes que pasaban saludaron sus dudas, en ellas vivían las certezas de lo celeste del cielo.Un rayo de sol lo iluminó e inmerso en el sonido del fluir de las aguas del Nilo, soñó con la sonrisa cálida y blanca de Oksun. Su piel color aceituna resaltaba  cuando usaba la túnica amarilla que él le había regalado. Yisán recitó
Los sueños anuncianotra realidad posible y los delirios otra razón
Sintió que se perdía en sus sentimientos, y al perderse cerró los ojos y escuchó el viento soplar sobre las hojas amarillas de los árboles. En la pradera cubierta del oro de las flores latieron los versos
En los extravíos Nos esperan los hallazgosPorque es preciso perdersePara volver a encontrarse
Y encontrándose, caminó buscando el  sendero que lo llevaría de regreso a la ciudad  donde Oksun tejía en el telar un enorme sol amarillo para su tapiz.Al ver los pájaros volar,  la sonrisa de Oksun  bendijo los pasos que  traerían a Bobum  y dibujó esas aves junto al enorme sol amarillo.
Intertextos: Eduardo E. Galeano