Publicado el 29 mayo 2015 por 50palabras
@50palabras_
El oficial llegó a caballo y rodeó el torreón. —Tus soldados te han abandonado y tu esposa ha muerto por defenderte. El rey, blanco como la cera, levantó la vista y pudo ver al otro lado de la pradera arlequinada a uno de sus soldados dar un sorprendente jaque mate.