Mi voz llega hasta vosotros desde este erial de cemento y acero en que habéis convertido los apacibles campos con que mi Dios os obsequió para vuestro deleite y apacentamiento. Y estoy aquí para exhortaros a que de una maldita vez y para siempre abandonéis ese camino de depravación e ignorancia a los mandatos que mi Dios, The Only One, El Verdadero, a través de Su Hijo -mi primo- me ha mandado a transmitiros, recua de impíos.
Habéis puesto vuestra fe, vuestras esperanzas en falsos profetas que halagan vuestros oídos con palabras fáciles y promesas tentadoras. Tentador es el camino al despeñadero por lo sencillo que es dejarse ir en bajada. Tentador es también creer que las malas acciones, malos pensamientos, malos deseos, no tendrán en su momento la justa recompensa de un lago de azufre y fuego y condenación eterna. ¡Damn...