Tener madres para esto...
Estaba yo trabajando tranquilamente, dándolo todo a doble pantalla, buscando datos y cosas que hago yo, con los cascos puestos y cantando, tranquilamente, sin molestar a nadie, cuando pongo el pause a todo para estirar las piernas y mi madre, desde la habitación de al lado, me dice que me ha mandado un WhatsApp -¿tan vagos nos hemos vuelto con la tecnología que me tiene que mandar un WhatsApp estando a escasos metros de mí? -.
Cuando abro el WhatsApp, me encuentro un audio, y miedo me da qué haya en él, porque cuando me lo dice está en el baño, y mi madre es muy educada, pero como buena madre mía, también está muy loca. Pero me arriesgo, y le doy al play...
¿Qué oigo? Pues a mí, soy yo cantando mientras trabajo, y de la que lo escucho, mi madre se desmonta de la risa, y me dice "y eso que no te he pillado en tu mejor momento".
Vale, canto como el culo, si tuviera perro ya se abría suicidado tirándose por la ventana con tal de mantener la integridad de sus sensibles oídos, y si añadimos que el 99% de lo que escucho está en inglés -y que no es mi fuerte-, os podéis imaginar, pero por eso no me dedico a cantar, hago otras cosas, y ESAS cosas ya acaparan mi multifunción, así que poder cantar a la vez es un plus merecedor de algún pin, como para encima preocuparme de afinar.
El audio es gracioso, y como prefiero reírme de mí misma antes de que lo haga otro, aquí os dejo el audio. Ya me he reído yo, ahora os toca a vosotros.
¿Desde cuando cantar en casa mientras se trabaja está reservado para los que saben cantar bien? Canta, canta hasta que te quedes sin voz, y así tus vecinos descansarán tranquilos... Suerte que en 28 años sólo me he quedado afónica una vez, mi voz es resistente, y seguiré jodiendo canciones con ella, y mis vecinos, bueno, si les molesta, estamos en paz...
Sugus de fresa al que acierte la canción que estoy