Simplemente, como os conté por estas mismas líneas hace unos cuantos días, hemos operado a mi adorada Hadita. Le han extirpado su ojo izquierdo -tan sumamente dañado desde su nacimiento- y he dedicado mi tiempo a cuidarla y a estar con ella en la "civilización", para mayor seguridad.
Su globo ocular estaba tan putrefacto que hubo que cortar y rascar más de lo esperado, lo que le motivó sendas hemorragias durante la intervención. Esto conllevó que tras la operación tuviésemos que vigilarla de forma colosal para que no se dañase la cara, ni se arrancase la mecha-drenaje, ya que el riesgo hemorrágico era altísimo.
Superado el peligro y retirado ya su drenaje, vuelvo hasta todos vosotros tras haber recibido varios mensajes privados donde mostrábais preocupación y extrañeza ante mi ausencia bloguera.
Intentaré ir recuperando el ritmo de publicación, poquito a poquito. ¡Me comprometo a ello!
Y ahora, os dejo con un montaje de fotos de Hadita durante el post-operatorio. Las fotos son de muy baja calidad puesto que se realizaron con la webcam de mi notebook, pero es lo que hay.
Gracias por continuar ahí.
Besitos para todos y todas.