Cuenta otra leyenda que a menudo cruzaban el puente los comerciantes que intentaban engañar a sus clientes. Los que eran pillados eran arrojados desde el puente.
Según otra leyenda, el puente era un lugar de encuentro entre los chicos que asistían a la academia militar y sus novias. Los chicos no aparecían, dejando a sus novias esperando hasta darse cuenta de que les habían mentido.
Una leyenda también cuenta que el puente era a menudo cruzado por jóvenes amantes que se juraban amor eterno. Las chicas también juraban que eran vírgenes, lo que a menudo resultaba ser mentira después de que las parejas se casaban. Como castigo, eran arrojadas del puente, ya que era el lugar donde habían mentido a sus amantes.
Otra leyenda sobre el puente habla de cómo pudo haber un gran lago debajo del puente, en el que vivían sirenas de agua dulce. Mentirían a sus maridos tritones para encontrarse con sus amantes mortales en el puente de arriba. Luego, saltarían al lago cuando terminaran.
En fín, el puente se llamó inicialmente Liegenbrücke, en alemán por "puente estirado" (estirado como "estirarse"), que suena muy similar a Lügenbrücke, que significa "puente de las mentiras".
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Sibiu, Rumanía.