Estoy haciendo planes para aprovechar las primeras horas del segundo día del tercer mes del año, porque resolví meterme a bañar a las 11:30 p.m., y no tengo secadora para el cabello, así que tendré que esperar a que medio-se-seque solo.
Antier, B tuvo una dramática escena de llanto desconsolado todo el rato que estuve bañándome, sin pausar siquiera cuando ya estaba yo afuera de la regadera, vistiéndome y pasándome el cepillo por el cabello. Ayer le huí al momento, pero no quise seguir acumulando mugrita, así que hoy esperé a su sueño más profundo.
Silvia Parque