Columbus es un joven cobarde que sigue vivo gracias su propia cobardía y su lista de reglas de supervivencia, mientras que Tallahasse es un profesional mata-zombies cuyo único objetivo es conseguir el último Twinkie de la Tierra (desde luego un papel que le va como un guante a Woody Harrelson), las jóvenes Wichita y Little Rock (quien para mi siempre será la pequeña Miss Sunshine) completan el cuarteto.
AÑO: 2009
DURACIÓN: 80 min.
PAÍS: Estados Unidos
DIRECTOR: Ruben Fleischer
GUIÓN: Paul Wernick, Rhett Reese
MÚSICA: David Sardy
FOTOGRAFÍA: Michael Bonvillain
REPARTO: Jesse Eisenberg, Woody Harrelson, Emma Stone, Abigail Breslin, Amber Heard, Bill Murray
PRODUCTORA: Columbia Pictures / Relativity Media / Pariah
GÉNERO: Comedia. Terror. Acción. Zombies.
SINOPSIS: En un mundo plagado de zombis, Columbus (Jesse Eisenberg) es un gallina, un joven que se encuentra aterrorizado por la situación, pero cuando te juegas el ser comido por los zombies, el miedo puede mantenerte vivo. De hecho su cobardía precisamente le ha permitido que sus sesos aún se mantengan en su cabeza. Sin embargo, Columbus se verá forzado a sacar el poco valor del que dispone para unirse a una banda de supervivientes a la que pertenece un cazador de muertos vivientes del que se hace amigo. Tallahassse (Woody Harrelson) es un macarra caza zombies cuya única determinación en su vida es lograr el último Twinkie (dulce americano) en la tierra. Cuando ambos unen fuerzas con Wichita (Emma Stone) y Little Rock (Abigail Breslin), que también han encontrado una manera original de sobrevivir en ese caos, tendrán que elegir que es peor: si confiar los unos en los otros o sucumbir ante los zombies.
Fuente: Filmaffinity.
Con tan solo cuatro actores (y dos medios...) y un montón de zombies maquillados con todo lujo de detalles dan como resultado una película de lo más gamberra y fascinante, pura diversión de un modo un tanto depravado, pero que resulta un gran homenaje al mejor cine de serie B.
El joven Columbus, encarnado por Jesse Eisenberg, nos presenta el mundo de Zombieland, que es a lo que han sido reducidos los Estados Unidos, y probablemente el resto del planeta, después de que un pobre hombre comiese una hamburguesa infectada y se convirtiese en el paciente cero de una horda de zombies que arrasaría el planeta. Nuestro protagonista es un chico joven que le tiene miedo a todo, y al que no le gusta la gente, pero que curiosamente cuando se ve rodeado de zombies empieza a echar de menos a la gente normal. Para sobrevivir en este nuevo mundo tiene una lista de reglas a seguir para continuar con vida, que sigue al pie de la letra y que nos explica con todo lujo de detalles.
A mitad de camino hacia Columbus, de ahí su nombre, en busca de sus padres ,o lo que quede de ellos, encontrará a un mítico personaje, encarnado por el magnífico Woody Harrelson y que parece escrito a medida del actor, el duro Tallahassee, que debe su nombre también al lugar al que se dirige. Juntos continuarán el camino hacia el este del país. Tallahassee es todo lo contrario al joven Columbus, un hombre duro y curtido, que parece haber nacido para matar zombies y proporciona el mayor espectáculo de la película con sus variopintas formas de exterminar muertos vivientes. En el fondo un tío muy duro con un corazón tierno.
Pero el duro Tallahassee tiene una pequeña debilidad, los Twinkies, en medio de un mundo devastado y poblado por zombies nada ansiará y buscará con mayor obsesión que poder comerse el último Twinkie del planeta, y es que, como muy bien dice, tienen fecha de caducidad, y ya no se fabricarán más Twinkies... A causa de esta búsqueda frenética del dulce americano, encontrarán a las hermanas Wichita y Little Rock, encarnadas por Emma Stone y Abigail Breslin, quienes tienen también su curiosa forma de seguir con vida, que realmente no difiere mucho de la forma que tenían de ganarse la vida cuando el mundo era un lugar apacible.
Los dos medios actores que completan el reparto son la preciosa vecina de Columbus, conocida tan solo como 406 (su número de piso) e interpretada por Amber Heard, quien le iniciará en las relaciones con el sexo opuesto, aunque no lleguen ni a preliminares, y también en la tarea de matar y rematar zombies para seguir con vida. Y el cameo de un gran Bill Murray haciendo de sí mismo, que se encarga de la mejor parte de la película. Impresionante.
Por lo demás Bienvenidos a Zombieland, es una película tremendamente original, en la que no sabes que va a ser lo próximo, tópicos a parte por supuesto, a medio camino entre el terror, o más bien gore, y la comedia, aunque personalmente me inclinaría mucho más hacia este último género.
Lo dicho, amantes de la serie B y las películas de zombies, no podéis dejar de degustar la magnífica Zombieland y rendirle un merecido homenaje a las películas del género con la más amplia de las carcajadas...