Me quiere mucho, poquito, nada.
Yo sentía que todo había sido tan simple, estaba feliz, sin dudarlo un poco. Salíamos de paseo, corríamos por un parque, no sé por qué ese cuadro tan romántico que no es pertinente a nosotros, que en realidad, no es como nosotros.
Tu pelo estaba mucho más largo y rizado, traías puesto anteojos y tenías la piel mucho más blanca. Parecías otra persona pero eras tú y yo estaba realmente feliz, era que estaba contigo y me sentía parte de tu vida, contaba contigo y tú conmigo, nos complementábamos y lo sabíamos, estábamos bien, todo estaba bien, pero realmente, no eras tú; era otra persona.