Cada mañana

Publicado el 29 noviembre 2023 por Aidadelpozo

Como cada día, monto en el autobús que me lleva al trabajo y me dispongo resignada a aguantar un recorrido de casi una hora. Hoy es cambio de turno y me recibe Domingo, un conductor amable que dice "hola", "¿qué tal? y" buenos días" y que no pone el aire acondicionado a 17 grados cuando en la calle el termómetro ronda los 0.
Agradezco ambos gestos que deberían ser cotidianos, pero que son poco habituales entre otros conductores. Nunca protestamos por la música que nos ponen a todo trapo los conductores ni por el estado de semicongelación que nos provoca el aire acondicionado ni por su silencio indiferente ante nuestro saludo al montar. Nos resignamos usando tapones en los oídos o cascos, calándonos hasta las orejas los gorros de lana y esperando el saludo de los compañeros al llegar al trabajo obviando la poca educación del primer rostro que vemos por las mañanas.
Es la cotidianidad de cada comienzo de día. A veces amable, a veces no.