¿Cómo podría volver a mirar las cuatro paredes que me rodean y pensar en un encierro? ¿Cómo podría llorar mi soledad? Lamentarme por no poder invitar a mis seres más cercanos, a mis seres queridos, a mis amigos (son 3) el resto, no lo son y si algún día pensé que lo eran… nunca lo fueron...
Y, si a mi mesa invité a quien me pidió cobijo, pese a lo que después la vida te envíe como agradecimiento… -expectativas que mejor jamás ser humano debe esperar- ¿qué sentido tiene que nos exijan cerrarlas hoy?
Cuando no hace ni tanto descubrí esa senda que borra el polvo de la tierra por la que anduve, sin dejar huella trasform-ándola en polvo estelar, fue un trabajo arduo, en el que me dejé más que el alma, pero en el que tracé un fluir y liberé mi esclavitud y la de aquellas tantan almas que hoy respiramos esperanza,al ver derruirse uno a uno... un tanque en place Place Tian'anmen, o un camino que borra las huellas de lo andado en un poema de Machado, o en aquel cemento derribado en el muro de Berlín, o en el de Trump, que no se llegará a erigir ante tanto desatino, tierras áridas que florecerán para parir vergeles ...
como en Israel, le pese a quien le pese, y todo ello gracias a la magia de una pequeña flor (como la del Petit Prince¿?, ese libro que desde mi más tierna infancia me contabas a los pies de mi cabecera, padre…y es mi guía) orgullosa y altiva, pero determinada, terca, -mientras me/nos quede un soplo de vida- y que ojalá tenga razón, la flor, (aunque nunca quisiera/mos tenerla), tanto por su dureza como por su delicadeza.
Este es el momento o "Ha llegado el momento", dicen.
Dejémonos mecer en melodías antiguas, comamos el pan de pobres, el de la libertad que nadie podrá reprocharnos si lo compartimos (ese poco pan) con quienes ni recuerdan su aroma ni a qué sabe…
Y pese a todo, si seguimos aquí, a pesar de tanto y tanto golpe, como decía A. Giacometti: “La gran aventura, es ver lo desconocido, ver renacer lo que no viste, día a día, en un mismo rostro. Y eso es más grande que cualquier viaje que puedas hacer alrededor del mundo”.
Sobre A. Giacometti ... ya en el enlace de su nombre ;) Uno de mis Maestros y guías.
"La grande aventure, c'est de voir surgir quelque chose d'inconnu, chaque jour, dans le même visage. C'est plus grand que tous les voyages autour du monde" .
Me siento bien este otoño, que nos conduce a nueva aventura, ésta en la que, aunque te sienta lejos… la distancia se ha encaprichado en nosotros, nos aúna y ata con hilos rojos, de tan fuertes, quebradizos, como todo el amor que te siento… y sé nos des-ata a ti y a mí.
Camin-ándono nos… más fuertes, más grandes si cabe.