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El cambio de estación, el frío, el viento, la lluvia, los cobijos, los rincones, las chimeneas, los braseros -y una eterna sucesión de términos relacionados con estas fechas-, nos trae un cambio de look al blog.
Tenía hecha la cabecera desde hace tiempo, pero no me pegaba mucho para verano, la veo más otoñal o invernal -pero qué coño, es una cabecera, no unos pantalones...-. En fin, que tenía ganas de hacerle un lavado de cara al blog, y creo que esta vez es algo más drástico que otras.
Con el fin de que los post se entiendan mejor he puesto un fondo clarito -que luego que si estáis cegatos y no lo leéis, que si queréis que os financie las gafas, que si la abuela fuma....-, así que ya no creo que tengáis queja, al menos en ese aspecto.
Intento hacer el blog lo más accesible posible -no todos tienen una vista de pájaro como la mía (¿algo tenía que decir para meterme con vosotros, no? Es broma, no tengo vista de pájaro, unos ojos tan pequeños no quedarían bien en mi cara...)-., como creo que he señalado en otras ocasiones, por lo que cualquier consejo, recomendación o crítica constructiva será bien recibida.
Sé que os tengo un poco abandonadillos, pero últimamente estoy algo desbordada de cosas, aunque espero que pronto se tranquilice el ambiente y pueda dedicar más tiempo a otras cosas, el blog entre ellas.
Y bien, ¿qué os parece el cambio? ¿Alguna sugerencia? Y ya que estoy, ¿os gusta, lo odiáis, os la trae floja...?
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