Caminando entre los mojones de tu vida
cuidando no pisar tus sueños
dando pasos a medida
estirando las piernas a veces
o muriendo en la timidez de un paso en otras
se hizo de noche,
noche larga
y no tengo, ni lumbre, ni ganas, ni sueños
ya se hizo noche y vos ni siquiera amaneciste
intento abrir la oscuridad pero vuelve a formarse
vuelve a dibujarse en tu piel,
en los rayos que parecían sol
la insistencia de la noche es solo comparable a vos
y a tu palabra llena de lejanía
prendida al musgo de tu soledad
caminando entre los mojones de tu vida
es preciso tener que parar
sacudirse el polvo
y despedirse amablemente y con un beso.