Todos escuchamos la palabra “CANCER” pero cuando yo la escuche mi cabeza nunca acepto su significado ni cuan grave pudiesen ser sus consecuencias, y luego mucho después, aun cuando mentalmente no lograba entenderlo, mi corazón ya lo entendía, se estremeció y comencé a temblar, a sentir mucho miedo, la angustia se apodero de mi cada segundo de mis días.
En esos momentos muchas cosas pasaron por mi mente, a pesar que pude pensar que me habías abandonado, a pesar de todo, te busque y te seguí buscando para poder llenarme de fuerzas, de esperanzas, de mucha fe y sobretodo de valentía para poder sentirme que no estaba sin ti, para sentir que pasara lo que pasara “todo estaría bien”.
Dios solo tú eres el dueño de la vida y en este caso de la vida de mi pedacito, de mi mami…. Sé que aunque el mundo, la gente, los médicos y la ciencia me decían que ya todo era difícil y que no era posible mas nada, mi familia y yo nunca perdimos las esperanzas ni la fuerza para seguir continuando; para nosotros lo imposible no existía y lo primordial era sanarte. Pero entendí a lo largo de verla sufrir, de ver tan de cerca esta enfermedad, que el mejor milagro era solo tu voluntad.
Por eso, te pido fortaleza y que por medio de esta enfermedad que le tocó vivir a ella y a nosotros, acrecientas en todos tu fe, aunque nunca de los nunca llegase a entender el por qué de lo que le tocó y nos tocó vivir.
Te doy infinitas GRACIAS, por lo que hiciste con nosotros, por lo que se que puedes hacer, y por lo que vas hacer, acepto tu perfecta voluntad y les pido perdón si en algún momento no supe entender o supe escuchar.
Adela Tannous
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