Canción de otoño
Relámpagos, rayos y truenos
llegan con las nubes negras
que ni siquiera los vientos
las dispersan
Se fue haciendo la noche,
mientras era la tarde tibia,
entre rayos y centellas
que dede ya nos anuncian
al otoño que nos llega.
Como fanfarria de fiesta
y con fuegos de artificio
la tormenta se desata
demasiado atronadora
para una lluvia muy fina
Tiemblan todos los cristales
al retumbo de tambores
otoñales
y las calles quietas y
en silencio
esperan los ríos
fríos
Amarillearon las hojas
que planean al caer
a los bordes del camino
en las aceras
y el parque.
Flotarán en esos ríos
navegando en el asfalto
mientras te espero
amor mío
y miro
desde mi ventana
en penumbra
la lluvia que cae serena.
Supuse que la fanfarria
era tu anuncio y llegada
para esta hora precisa
y me puse rosas
rojas
en mi cabellera rubia
y me perfumé la piel
que te espera tibia
tan dulce como la miel
Vendrás cabalgando
un rayo
refulgente y vigoroso
y cegarás mi mirada
mientras me robas mis besos.