Candados cerrados con los nombres de los dos enamorados, a ambos lados del puente. Toledo, al igual que Sevilla y demás ciudades están poniendo esta práctica de moda.
Enamorados, que juntos, cierran en argollas, un candado, símbolo de su amor, donde creen firmemente que mientras permanezca cerrado, ellos también, el uno alrededor del otro, juntos, felices, enamorados.
Me pregunto sí cuando la relación se ha roto, vuelven al mismo puente, para abrir el candado y dar fin al amor, relación o convivencia...seguramente, no. Es más fácil fluir, hacer locuras, demostrarse amor eterno cuando hay amor, encandilamiento o "enchochamiento". Es curioso, como la palabra odiar la usamos(usan) para los ex.
¿No os parecería bonito que al igual que dan muestras de su amor poniendo el candado, también dieran muestras del desamor, quitando el candado? Las cosas como son, sí una relación sale mal, mejor que sólo salga la relación mal que encima el odio, y el cese de todo contacto también se añada.
¿Habéis oído algo sobre esta práctica de los candados, aparte de en algún libro de Federico Moccia?