Foto: Stamatis GR
Saladamente caen las horas
espiraladas, tristes y bruscas,
en obituarios cotidianos,
cuando los nocturnos clavos
del recuerdo miran atrás
para saberte,hueca angustia del verbo
sentir,
porque están yéndote
y yo aun no llego.
©® Susana Inés Nicolini Nota: éste pequeño poema fue realizado durante un intercambio, entre escritores, en mi Facebook, casi en un juego, y no se sabe bien cómo "desapareció". Por supuesto están hechos todos los registros de propiedad intelectual que marca la Ley, y además, con ésta publicación dejo testimonio de ello.