CAP 11: Eres mas que una simple casualidad

Publicado el 02 agosto 2020 por Benjamín Amoedo De La Grana

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Habían pasado ya un par de meses desde que hubiera cometido el mejor y mas valiosos de mis errores ,el equivocarme de lugar y de clase para coincidir en el mismo aula contigo, sentados el uno al lado del otro, se que sueno terriblemente repetitivo, pero cuando no encuentras las palabras para explicar algo perfecto, mágico, si cabe casi milagroso, pues acabas cayendo en repeticiones para intentar entender una situación que simplemente no tiene explicación, a lo mejor soy yo que exagero pero sinceramente me parece una casualidad demasiado grande para que se trate tan solo de una casualidad… Una vez mas divagando… como iba diciendo, cuando todo comienza con una casualidad tan grande mezclada con unos sentimientos tan intensos que no era capaz de entender resulta difícil de encontrar el sentido a todos esos cambios que irrumpieron de golpe en mi vida.
Es cierto que empezamos muy despacito, hablando con monosílabos en conversaciones meramente dedicadas a la asignatura, irremediablemente el roce hizo el cariño nos hicimos amigos. Si lo pienso ahora es raro, estuve muy cerca de dejar esa clase, pues como es evidente yo no quería asistir, ese instituto ademas estaba lejos de mi casa, incluso unas horas coincidían algunas semanas con mi horario de clase habitual, en definitiva no había nada que valiese la pena de ese curso, el horario era horrible, la distancia me obligaba a ir en coche y la asignatura en si me importaba nada y menos, no había ningún tipo de motivo para que yo siguiera matriculado en ese lugar, por eso las dos primeras semanas como es lógico pensé en darme de baja de inmediato pero por unas cosas o por otras nunca lo llegue a hacer, primero por que me daba pereza pues la clase empezaba a las seis de la tarde, por lo tanto tenia que madrugar para ir a las oficinas por que solo habrían por la mañana, eso obligaba a que tuviera que faltar a mis clases habituales, por lo tanto nunca llegue a hacerlo, es cierto que estuve cerca, pero al final sin saber por que no solo no me di de baja, sino que también acudía a clase con normalidad, a pesar de que no me importaba ni lo mas mínimo lo que estaba aprendiendo, de echo en la mayoría de las clases no me enteraba de nada, no prestaba atención, me aburría como una ostra, no hacia los deberes etc... ya existía esa especie de conexión que ni tu ni yo podíamos explicar y que me motivaba a seguir yendo a clase sin ningún motivo ni razón aparente. No existía nada que me llamara la atención de esa clase, incluso pasados los años sigo encontrando todo lo que aprendí completamente inútil e intrascendente en mi vida sin ningún tipo de aplicación, aun así yo seguía, sin saber por que, asistiendo todos los días a clase, y en verdad que por aquel entonces todavía no sabia por que lo hacia, no sentía nada por ti aun, sin embargo estaba a gusto a tu lado y eso ya era motivo mas que suficiente para ir, era como si una fuerza invisible me empujara, algo, no sabría decir que me impulsaba a ir una y otra vez, ademas de esta forma iba y volvía a casa en coche lo que hacia los meses de invierno mucho mas llevaderos para mi, atando cabos fue como si todo el universo se hubiera confabulado ligeramente para que tu y yo nos siguiéramos viendo, para que poco a poco esos sentimientos que ya sentía por ti, pero que aun desconocíafueran despertando de ese profundo sueño aletargadoen el que se hallabanamordazados por el miedo el dolor y la soledad, esperando que la limpieza de tus ojos y la ternura de tu sonrisa encendieran por completo mi oscuridad mientras poco a poco con cuidado la dulzura de tu voz curaba las heridas de mi alma y las cicatrices de mi maltrecho y maltratado corazón.       CONTINUARA