El arquitecto:
Charles ÉdouardJeanneret-Gris, conocido como Le Corbusier (La Chaux-de-Fonds, Romandía, Suiza; 6 de octubre de 1887 – Provenza-Alpes-Costa Azul, Francia; 27 de agosto de 1965), fue un teórico de la arquitectura, arquitecto, diseñador y pintor suizo nacionalizado francés. Es considerado uno de los más claros exponentes del Movimiento Moderno en la arquitectura, y uno de los arquitectos más influyentes del siglo XX
Hoy en día la obra y el pensamiento de Le Corbusier siguen vigentes tanto en la práctica como en la enseñanza y en la teoría de la arquitectura. Como una de las figuras clave de la arquitectura moderna, la continuación del movimiento tiene en él y en sus obras un referente directo. Como uno de los precursores del brutalismo, sus trabajos posteriores han servido de base a corrientes arquitectónicas apoyadas en la tectónica (expresión de los materiales y sistemas constructivos) y en diferentes enfoques regionalistas
Si bien para muchas figuras del pensamiento arquitectónico contemporáneo, la modernidad es un movimiento obsoleto, y por lo tanto las obras y premisas de su arquitectura no deben continuarse, hay un grupo importante de arquitectos (llamados neomodernos o simplemente modernos) que continúan haciendo arquitectura en el espíritu de Le Corbusier
Introdujo la proporción áurea en muchas de sus obras, por ejemplo se puede apreciar en el módulo de la Capilla de Notre Dame du Haut
Ha influido de manera muy importante en arquitectos de todas partes del mundo. En México fue su seguidor Mario Pani Darqui, en Brasil Oscar Niemeyer, en la Argentina, Antonio Bonet. En Uruguay, el teórico urbanista Carlos Gómez Gavazzo. En España, Francisco Javier Sáenz de Oiza…
La vivienda:
La Casa Curutchet se emplaza en una zona residencial de La Plata, en un lote trapezoidal frente a un pequeño parquecito triangular, antesala de un enorme parque llamado el Bosque. Esta cercanía a la naturaleza y las proporciones volumétricas del lote vecino influyen en Le Corbusier, quien tomaría en cuenta estos aspectos para plantear integración de la casa a su entorno.
LE CORBUSIER Y EL DR. CURUTCHET
El notable cirujano argentino Pedro Domingo Curutchet escribió a Le Corbusier en 1948 solicitándole el diseño de su casa. Curutchet nunca conoció a Le Corbusier ni este último visitó el terreno, pero el médico mantenía una “compartida afinidad” con el arquitecto, a quien consideraba un intelectual innovador.
El programa de la casa incluía un consultorio, una vivienda para el doctor, su mujer y sus dos hijas, habitación para huéspedes y servicios. Para la construcción de la casa (1949-53) fue importante la participación del reconocido arquitecto argentino Amancio Williams, quien no sólo propuso modificaciones al proyecto de la casa (que Le Corbusier aceptó) si no que tuvo a su cargo la dirección y ejecución de las obras. Luego del deceso del doctor, las hijas entregaron la casa en custodia al Colegio de Arquitectos de La Plata.
La casa Curuchetse organiza basándose en un espacio central en el que destaca la presencia de un árbol que sirve como límite virtual entre la zona pública y la privada de la casa, diferenciándose dos volúmenes que permiten que la función se distribuya en forma clara y los espacios se organicen bajo características particulares.
Primer nivel
El visitante es recibido por un pequeño pórtico que, además de marcar simbólicamente el ingreso a la vivienda, ofrece una escala humana adecuada para el recibo. El espacio interior es separado de la calle por una tenue frontera dibujada por una fina valla metálica. Además del ingreso peatonal se encuentra el acceso con vehículo. La primera planta es un bosque de columnas, las cuales se organizan en trama, independientemente de los muros, y permiten el ingreso de luz a la vez que dan una sensación de amplitud al espacio. En la parte posterior se hallan los servicios. Del primer nivel nace la rampa cuyo primer descanso entrega al inicio de las escaleras (encerradas en una caja de vidrio).
Entrepiso
La rampa (que es una circulación independiente de las escaleras que conducen a la vivienda) conduce al entrepiso, en el que se halla el consultorio. Este consta básicamente de una zona de espera y consulta (que es la que tiene mejores visuales). La zona de internamiento, ubicada en la parte posterior de la consulta, cuenta con servicios higiénicos independientes.
Segunda Planta
Corresponde al área social de la vivienda, desde la que se accede a un amplia terraza que se extiende en todo el ancho del lote y que goza de generosas visuales hacia el parque. Para evitar demasiada incidencia solar sobre la terraza, que en verano la haría insufrible, Le Corbusier planteó el uso de un parasol y brissoleil, los que aunados al árbol, proveen de sombra al espacio. Integrados a la terraza están el estar a doble altura y el comedor. La funcionalidad de la cocina, provista de una entrada de servicio, es sorprendente para la época en la que fue diseñada.
“en el nivel de la vivienda (…) se encuentra el hall abriéndose al estar (biblioteca a la derecha de la puerta, después el piano). El estar abre a doble altura del cerramiento, hacia el norte y su nivel continúa directamente con la “terraza-jardín” o “jardín suspendido” concebido para crear la parte más importante de la casa, aquella donde uno se tiende, sea al sol, como a la protección del mismo y al verde.”
Le Corbusier en carta al Dr. Pedro Curutchet el 24 de mayo de 1949
Tercera Planta
Consta de dos dormitorios, cada uno con su baño, el primero para el doctor y su esposa y el otro para sus hijas. Frente al dormitorio principal hay un escritorio espacialmente integrado a la doble altura del estar. Desde el dormitorio de las hijas es posible utilizar un sistema de persianas de madera que controla el ingreso de la luz y la privacidad del recinto.
Un análisis en corte permite apreciar las ricas relaciones visuales y espaciales de la vivienda, la forma cómo se modela el espacio y el uso de la transparencia para lograr maximizar la sensación de amplitud en un lote pequeño.
Los 5 principios de Le Corbusier:
Desde la publicación de su libro Hacia una arquitectura y sus escritos en L’EspritNouveau, Le Corbusier había planteado 5 principios importantes característicos de la nueva arquitectura, los cuales plasmó en su más famosa casa, la Villa Savoye. La Casa Curutchet es también un buen ejemplo para entender estos cinco principios de la arquitectura corbuseriana.
a) Los pilotis. La casa se organiza en una trama de columnas, independiente de los muros, las cuales levantan el edificio del terreno posibilitando el uso de jardines y patios.
b) La planta libre Al independizarse la estructura, se eliminan las paredes de carga típicas de las casas de antaño, facilitando gran flexibilidad en la disposición e interconexión de los ambientes.
c) Fachada libre También producto de la independencia de la estructura, la fachada se transparenta ya que no está compuesta por muros de carga.
d) Ventana corrida. El uso de grandes ventanas provee iluminación y ventilación al espacio. La ventana corrida permite gozar de magníficas vistas y el ingreso generoso de luz
e) Terraza jardín Aprovechamiento de las terrazas para usos domésticos, entre los que se pueden incluir áreas de jardín.