Es temprano, salgo a buscar la prensa, y me siento en el café de todos los días, te mando un mensaje, nos enviamos pétalos de rosa al aire desde el balcón y nos contamos que esta noche encenderemos la chimenea.
Te recuerdo, y que bueno, que te tengo en este ahora que no sabe de pasados cítricos que se mezclan con canelas y tequilas.