José Díaz del Olmo y los celos en los perros
Por: José Díaz del Olmo.
Los perros pueden sentir celos frente a cualquier persona o animal que les pueda quitar protagonismo con sus dueños. Muestran una respuesta emocional ante la sensación de posible pérdida del sujeto u objeto deseado. Demuestran celos ante determinadas situaciones, pero por causas distintas a las personas, como la lucha por perpetuar sus genes. Y es que, en este sentido, personas y perros somos más parecidos de lo que creemos.
Señales que nuestros perros son celosos:
- Irritabilidad, sobre todo, cuando está presente la persona o animal que le despierta los celos.
- Cambios de estado de ánimo. Puede enseñar los dientes y gruñir y, al poco tiempo, normalizar su actitud.
- Mostrarse muy posesivo con la persona o animal que quiere monopolizar. Es decir, está “obsesionado” y les persigue.
- Puede darse el caso de que destroce objetos de la casa para llamar la atención y descargar su tensión.
Los celos pueden llegar a ser extremos y crear problemas de convivencia de difícil solución. Algunos especialistas en comportamiento canino califican los celos patológicos de doble personalidad y lo denominan síndrome de Dr. Jekyll y Mr. Hyde. En estos casos extremos y muy problemáticos, la terapia no garantiza una total recuperación.
¿Cómo evitar los celos en los perros?
- No tratar al animal como si fuera un niño.
- Marcarle unas pautas y normas definidas.
- No dejarle hacer lo que quiera y ponerle límites en su comportamiento.
- Establecer un orden jerárquico claro y adecuado, donde el perro ocupe el último escalafón.
- Cuando se da un ataque de celos, la reprimenda debe provenir de la persona que el animal considera de su posesión.
- Los problemas con los celos pueden llegar a enquistarse y complicar mucho la convivencia. Antes de que esto ocurra, es mejor consultar al veterinario.
Hasta el próximo post,
Doctor José Díaz del Olmo