jueves 28 de marzo de 2013
El sur
amarillo, los brumosos
sótanos
donde nace cada nota,
el alcohol
donde nada el hielo
del
pasado; todo va, trémulo
y
sostenido, en la nota del blues.
El
algodón de los clanes, la verde,
violenta
orilla del Mississippi,
las
confederadas estrellas;
todo va,
oscuro y doliente,
en la
nota del blues, en la canción
que toca
siempre, esa plegaria
dedicada
a un Cristo
tan lejano
como los
días de la infancia
y de la
muerte.