“Peones: ellos son el alma de la partida, solos forman el ataque y la defensa” (Philidor). “Un peón pasado aumenta su poder a medida que el número de piezas en el tablero disminuye" (Capablanca).“Un peón pasado es un criminal, que debe ser mantenido bajo candado y llave. Leves medidas, tales como vigilancia policiaca, no son suficientes” (Aaron Nimzovich).
"Brava comparación -dijo Sancho-, aunque no tan nueva, que yo no la haya oído muchas y diversas veces, como aquella del juego del ajedrez, que mientras dura el juego, cada pieza tiene su particular oficio; y en acabándose el juego, todas se mezclan, juntan y barajan, y dan con ellas en una bolsa, que es como dar con la vida en la sepultura" (El Quijote, II, cap. 12).