El portal del periódico colombiano El Tiempo, publicó el pasado 15 de octubre del 2009 un reportaje de Andrea Linares Gómez titulado “Pérdida de custodia por falsa denuncia o si un padre daña imagen del otro, plantea proyecto de ley” (http://www.eltiempo.com/colombia/justicia/perdida-de-custodia-por-falsa-denuncia-o-si-un-padre-dana-la-imagen-de-otro-plantea-proyecto-de-ley_6335647-1). Dicho artículo discute el proyecto de ley que busca instaurar la custodia compartida en Colombia. Este proyecto responde a una tendencia en la sociedad colombiana. Según la jueza de familia Ana Lucía Suárez, aunque en la mayoría de los casos es la mamá quien quiere la custodia de los hijos, cada vez más frecuentemente son los padres quienes buscan tenerla.
Siempre es una buena noticia saber que otro país se suma a la corriente mundial en pro de la custodia compartida, especialmente si ese país es uno tan importante y de tanta influencia en Latinoamérica como lo es Colombia. Pero lo que me llamó la atención es que el proyecto establece que si uno de los progenitores desvirtúa la imagen del otro progenitor delante de sus hijos o hace denuncias temerarias de abuso sexual en contra del padre no tutor, éste perderá la custodia de sus hijos. El proyecto también contempla el retiro de la custodia a quien maltrate a sus hijos.
Federico Cardona, presidente de la organización colombiana Fundación Primero la Infancia, que reúne a padres y madres no custodios, indica que las acusaciones falsas son el problema más común entre parejas separadas. Estas falsas imputaciones se usan como instrumento para alejar al otro progenitor de sus hijos y crear en éstos una imagen negativa del padre no custodio. Esta dinámica, como todos ya sabemos, es típica en los casos del Síndrome de Alineación Parental (SAP).
El problema de las acusaciones falsas durante las disputas por custodia es uno gravísimo. En países como Puerto Rico y Chile el fenómeno alcanza proporciones epidémicas. La principal razón de esta proliferación de falsas acusaciones es precisamente su impunidad: en las cortes de familia, cualquier persona puede acusar a otra de cualquier barbaridad, sabiendo que las cortes, so color de proteger a los menores, impedirán todo contacto entre el acusado y sus hijos, sabiendo también que cuando las acusaciones sean probadas falsas, el vínculo entre los hijos y el progenitor ausente se habrá debilitado, y el acusador no tendrá que dar cuenta de sus acusaciones maliciosas. El logro de esta legislación es que, como muchos grupos pro custodia compartida han venido pidiendo desde hace mucho, por fin existiría una figura jurídica mediante la cual el acusador malicioso podrá ser llevado a las cortes y ser juzgado.
Confío en que esta ley pro custodia compartida sea aprobada en Colombia, y en que otros países latinoamericanos sigan este ejemplo.
LOS COMENTARIOS (1)
publicado el 16 febrero a las 21:39
eso seria lo peor que pueden hacerle a un hijo, la custodia compartida afecta la estabilidad emocional de un menor. ademas imaginesen un mes con unas constumbres en la casa dle papa y al otro mes con otras constumbres en la casa de la mama, fatal!!!!