Siguiendo con el post anterior debo decir que ya fui a la charla de John C. Morris, muy capo, tremendamente humilde y simpático, un ejemplo para muchos sin duda. Después el tipo nos acompañó al journal club, así que lo tuvimos disponible para hacerle preguntas mientras comíamos pizza y discutíamos su paper.
Volviendo al alzhéimer, ya vimos en otros post como por ejemploesteoeste, que hay un par de teorías con respecto a las causas de la enfermedad. JCM en particular apoya la hipótesis más popular, que es la de que las placas amiloides son las responsables. Pero como hay controversia al respecto, él habla del tema en su paper y toma partido por las placas argumentando que estas aparecen antes que las marañas (tangle en inglés) de proteína tau.
¿Se acuerdan cuando dije que nadie puede saber a ciencia cierta si tiene alzhéimer hasta que se muere? ¿Qué putada no? Bueno la verdad es que se están haciendo avances bastante importantes al respecto, y lo que dije antes es cierto para la mayoría de la gente pero no para todos, porque ya hay disponibles nuevos métodos de diagnostico precoz.
Se puede empezar con un examen genético para buscar los alelos de los genes que generan la predisposición a la enfermedad (proteína precursora del amiloide y las presenilinas 1 y 2)
También se puede chequear la presencia de APOE4 y APOE2, si tenés APOE4 tenés una mayor predisposición a tener alzhéimer, si tenés APOE2 sos inmune a la enfermedad.
También existe un sistema para ver las placas sin tener que abrir el cerebro, se utiliza una tomografía por emisión de positrones (PET), como marcador hay que elegir el compuesto Pittsburgh B que se pega a la las placas y... voila, ya se pueden ver la placas sin necesidad de un serrucho o un bate de béisbol.
Por último, un método simple y útil es comprobar el correcto desempeño en las funciones cognitivas antes de los 50 años. Un deterioro posterior podría entonces ser comparado contra el propio desempeño disminuyendo así el margen de error en el diagnóstico.