Como arena se me fue
de este puño que solté.
Fue recuerdo, fue el ayer,
fue el presente alguna vez.
Cual paciencia se agotó.
Es café que envaneció,
lo que el río se llevó,
el pinar que se quemó.
Del Arroyo Corta Pié
fue el cocuyo que agarré,
la canción que comencé
y entre llantos me quedé.
¡Fue la décima, José!
O la risa que gocé,
recurrente aquel café
o el descanso que anhelé.
Fue la roca que imité
cada vez que soporté
cada invierno que se fue
cada noche que soñé.
Fue quizás lo que acerqué
cuando a ciegas me mandé
de aquel sitio que menté.
¡Yo no sé qué fue, no sé!
Algo me llamó a su paso,
algo me inventó el ocaso,
algo presentí si acaso...
algo me tomó del brazo.
Cristino Alberto Gómez
29 de noviembre del 2017
@CristinoAlberto