Cómo buscar empleo actívamente y no morir en el intento
¿Qué es la búsqueda de empleo? ¿En qué consiste? ¿Cómo se hace? ¿Cuándo y por dónde empiezo? ¿Cuánto tiempo dura? ¿Quién me puede ayudar?…..
Estas son algunas de las preguntas que se hacen las personas desempleadas nada más llegar a esta situación. ¿Respuestas? Todas las que queramos. Cada persona se responderá a estas preguntas de manera muy diferente a como lo hagan el resto. Esto dependerá de diversos factores: objetivos planteados, edad, entorno, habilidades, contactos, herramientas disponibles, apoyos, etc…
Pero a pesar de estas divergencias en las respuestas, sólo hay una cosa importante: realizarla de forma ACTIVA. Esto no quiere decir que ser activo sea sólo recorrerse todos los polígonos industriales de mi ciudad, o sólo abrir Infojobs por las mañanas para “ver si hay algo para mí”, o sólo decirles a mis amigos que estoy buscando trabajo. Ser activo en la búsqueda de empleo consiste en “realizar TODO tipo de acciones encaminadas a la consecución de un empleo”.
Hay que tener en cuenta que el número de desempleados ha aumentado en más de 3 millones de personas en los últimos años. Este dato, en búsqueda de empleo, hay que traducirlo en: mayor competencia, mayor especialización y mayores dificultades para acceder a un nuevo empleo. Por ello, la búsqueda debe ser más activa, intensa y diversificada que nunca. En estos momentos, todo será mucho más complicado para aquellas personas que no se vuelquen al 100% en su propia búsqueda de empleo.
Siempre he pensado y aconsejado que la búsqueda de trabajo tenemos que entenderla como “un trabajo en sí”, marcando objetivos, rutinas, estableciendo una planificación adecuada, etc… Y es en la situación actual que vivimos cuando este mensaje debe tener mayor arraigo.
Un primer análisis de cómo debe iniciarse la búsqueda de empleo lo mostré en el artículo “Estoy desempleado ¿qué hago ahora?” Es el momento en el que hay que auto conocerse, analizar el entorno, establecer nuestros propios objetivos laborales, personales, formativos, etc. Si se tuviera alguna dificultad en estos pasos iniciales, básicos para una búsqueda adecuada y adaptada a cada persona, sería recomendable solicitar la ayuda en algún servicio de orientación laboral.
Una vez determinados los aspectos anteriores, es cuando empieza el trabajo de campo puro y duro. A continuación enumeraré las acciones que deberían tenerse en cuenta para llevar a cabo una búsqueda de empleo de manera activa. ¡Ah! es importante usar una agenda, donde iremos anotando todos los pasos y acciones que vayamos dando en cada momento.
♦ Elaborar el currículum: es fundamental diseñar un currículum adecuado a nuestro perfil e intereses profesionales. Actualmente hay diversos formatos y soportes para su elaboración (tradicional en papel, CV online, video CV).
♦ Desarrollo de habilidades para la búsqueda de empleo: mejorar aquellas habilidades deficitarias que hemos detectado durante nuestro auto conocimiento (asertividad, escucha activa, empatía, etc.). Estos aspectos se pueden trabajar en talleres grupales desarrollados al efecto por los servicios de orientación, o bien de manera individualizada.
♦ Inscripción en el Servicio de Empleo Público correspondiente, actualizando todos los datos profesionales, formativos, y de intereses y expectativas. Realmente no hay mucha confianza en estos Servicios, y puede que no sean la solución a nuestro desempleo, pero como un recurso más que es, debe tenerse en cuenta.
♦ Inscripción en bases de datos de Empresas de Trabajo Temporal, Empresas de Selección de Personal y Agencias de Colocación.
♦ Inscripción en portales de empleo de Internet, donde, además de incluir los datos necesarios en su base de datos, se deberá realizar una búsqueda de ofertas de empleo utilizando los filtros establecidos para ello, en función del perfil profesional e intereses que tengamos.
♦ Metabuscadores: del mismo modo que se hace la búsqueda de ofertas en los portales de empleo, se puede hacer también a través de los Metabuscadores (buscadores cuyo funcionamiento es similar a Google, Yahoo, etc…, pero exclusivamente para ofertas de empleo en la red). Aquí se puede obtener más información sobre Metabuscadores.
♦ Autocandidatura: consiste en contactar con las empresas de nuestro entorno, en función de nuestro perfil profesional, y en ausencia de oferta de empleo, ofrecer la candidatura para futuros procesos de selección.
♦ Empleo público: desgraciadamente, en la situación actual, la oferta de empleo público se ha reducido bastante. Para obtener información sobre oposiciones a la Administración, se puede consultar www.buscaoposiciones.com, o los diferentes Boletines Oficiales (Estado, Comunidades Autónomas, Provinciales, Diputaciones). Existen también convocatorias para personal laboral, igualmente publicados en los diferentes boletines.
♦ Red de contactos: esta “herramienta” es una de las que tradicionalmente se ha utilizado en la búsqueda de empleo, y actualmente sigue siendo una de las vías más importantes para encontrar trabajo. A la red de contactos “real” hay que sumarle la red de contactos “virtual” o digital, formada por todos aquellos contactos establecidos a través de nuestra participación en Redes Sociales (Twitter, Linkedin, Facebook, etc.).
♦ Visibilidades la red o 2.0: cada día está adquiriendo mayor importancia, y es una forma de hacernos ver en las Redes Sociales, las cuales están siendo cada vez más tenidas en cuenta por los reclutadores. Este tema fue tratado en “Visibilidad 2.0 y aptitud: claves de la empleabilidad en la era digital”.
♦ Formación: es posible que en nuestro análisis inicial, previo a la búsqueda activa de empleo, hayamos detectado alguna necesidad formativa. Durante la búsqueda puede ser el momento de cubrir dicha necesidad a través de acciones formativas adecuadas. Estas pueden ser presenciales o a través de las diferentes plataformas de e-learning, de fuerte implantación en los últimos años.
♦ Asistencia a eventos de empleo o de empresas del sector de nuestro interés: es otra forma de hacerse visible, participando y estableciendo contactos en este tipo de eventos. Fomenta el Networking, que está adquiriendo cada vez más importancia para establecer relaciones profesionales.
♦ Autoempleo: surge como una alternativa más en la búsqueda activa de empleo. Hoy en día, ante las dificultades que se encuentran para emplearse por cuenta ajena, hay una “corriente” pro-emprendimiento, como opción para emplearse. Está claro que tiene connotaciones diferentes a la búsqueda de empleo ordinaria, pero es una opción a tener en cuenta si se dan las condiciones adecuadas.
Como dije al comienzo de este artículo, la búsqueda de empleo tiene carácter individual, cada persona decide realizarla de la forma que cree más conveniente. He intentado aportar los aspectos más importantes que debe tener una búsqueda de empleo para que se pueda considerar suficientemente activa.
Y ahora ¡¡¡ a trabajar !!!