La elección de una cámara réflex trae de cabeza a todo el que quiera adquirir una. La gran variedad, de marcas, de funcionalidades y en consecuencia, de precios, hace que tomar una decisión acertada pueda ser difícil. Para hacerla un poco más llevadera y sencilla, te damos algunos consejos, para que al menos puedas descartar algunos modelos.
¿Cómo elegir una nueva cámara réflex?
Comparadores ¿Sí o no?
Una herramienta que puede ser útil puede ser los comparadores de modelos de cámaras, pero esos déjalos mejor para el final, cuando ya estés decidiendo entre dos o tres réflex, para tener en cuenta en que flojea y en que destaca cada una, en relación a las demás elegidas.
La decisión de la cámara está muy influenciada respecto a si el dispositivo que quieres comprar es el primero que vas a utilizar o si lo que quieres es renovar tu cámara. En el caso de ya disponer de una cámara réflex y de accesorios para ella, debes tener muy en cuenta que el modelo nuevo elegido sea compatible con ellos porque no se caracterizan por un precio bajo precisamente.
¿Es tu primer modelo?¿Qué marca me quedo?
En el caso de que sea tu primera cámara réflex, tienes un impedimento menos a la hora de elegir, aunque también el abanico de posibilidades es más grande y la decisión puede ser más complicada.
La marca de la cámara no es determinante. Todos los fabricantes de dispositivos de fotografía que se dedican a las cámaras réflex tienen buenos modelos. No ocurre lo mismo con las cámaras compactas, ya que están especializadas en llegar a un público más extenso y poco especializado en conocimientos fotográficos, por lo que la lista de marcas que se dedica a comercializar estas cámaras es casi interminable.
Lo que sí debes tener en cuenta es el precio de los accesorios y la posibilidad de encontrarlos compatibles, en este ámbito Canon y Nikon salen ganando.
Un aspecto que debes tener muy en cuenta es el visor. Aunque parezca mentira hay mucha diferencia entre unos modelos y otros, ya que tiene mucha importancia a la hora de ver la imagen clara. Lo mejor en este caso es probarlo y decidir con los que te encuentras más cómodo.
Lo importante es que sea cómoda para tí
Otra característica que puede tener mucha importancia a la hora de la decisión en la sensación de agarre y de manejo de la cámara. Para ello lo mejor es que acudas a una tienda especializada donde puedas tocarla y manejarla, aunque no sea en profundidad.
Puedes iniciarte con un pack
Muchas tiendas ofrecen la cámara réflex en un kit. Es una manera fantástica para elegir tu primera cámara, ya que puedes conseguir un precio más asequible y tener los accesorios que necesitas para iniciarte en el mundo de la fotografía, que podrás ir ampliando con el tiempo.
En este aspecto debes tener en cuenta la calidad de dicho kit, sobre todo la calidad de las lentes, ya que el objetivo que viene de serie suelen ser de baja calidad, pero es muy válido si hablamos de tu primera adquisición.
O mirar las opciones de segunda mano
También puedes acudir al mercado de segunda mano que en este ámbito es muy grande. Tener una gran variedad puede ser muy bueno, pero también puede ser peligroso. Por eso, si no conoces en profundidad las funcionalidades y especificaciones de la cámara, lo mejor es que deseches esta opción hasta que no tengas más conocimientos.
Otro aspecto son las funcionalidades de la cámara. El gran avance de la tecnología, hace que haya una gran variedad en los extras de los dispositivos pero, ¿realmente son necesarios? Piensa en lo que realmente necesitas, ya que todas estas funciones extras suben mucho el precio. Si no eliges adecuadamente, probablemente muchas de estas opciones no las utilizarás nunca.
No nos olvidemos del precio
Por último, y en muchas ocasiones, el determinante, es el precio. El rango de coste de una cámara réflex es muy amplio, puedes encontrar modelos desde los 300 euros, a algunos que superan fácilmente los 6000 euros.
Una vez vistos todos estos consejos, para elegir tu cámara puedes seguir dos procedimientos:
- Establecer un precio máximo y buscar los modelos de mayor calidad o que ofrezcan las prestaciones que necesitas ajustados a ese coste.
- Tener claro las prestaciones, las especificaciones y todos los puntos anteriores, que crees que se cumplen tus necesidades y comprar una cámara que las ofrezca, independientemente del precio.
Una vez que reduzcas tu lista en dos o tres modelos, como hemos dicho al principio puedes utilizar comparadores de características para elegir la más adecuada para lo que necesitas y la que mejor relación calidad/precio tenga.
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