Hay un estudio, hecho en EEUU, que afirma que el 30% de los matrimonios estadounidenses se quieren como el primer día. Lo han averiguado estudiando las reacciones del cerebro, que son análogas a las de los recién enamorados.
Otro estudio interesante, dice que las reacciones del enamoramiento en el cerebro son las mismas que las de una dosis de coca (efectos del amor en el cerebro).
Es posible que los científicos del segundo estudio estuvieran colocados, perdón, enamorados, y todo les pareciera perfecto. Hasta las luces esas de colores que iluminaban las partes del cerebro implicadas en el experimento. Que, curiosamente, apagando el monitor, seguían allí.
Quizás los científicos del primer estudio también estuvieran colocados, digo, enamorados, y estuvieran expresando su ilusión de que ese estado de plenitud les durase eternamente, de gratis, claro, que las drogas son caras.
También es posible que yo sea una descreída y que todos ellos tengan un poco de razón.
Feliz San Valentín, queridos fantasmas.Sigue leyendo