Es sensibleal aullido de los lobos,y a los taxis,su amor porla noche,inevitable,y suamistad con las estrellas, eterna.Quisieratener una heredera,unaimpostora,unadiscípula creada a su imagenysemejanza;alguien queguarde el desveloy dignifiquesu esplendor. Que sepatanto como elladeseducción y de soledad.Que tengatanto de cisnecomo laerguida belleza de sus claros.Que puedanarrar historiassobre losjardines del edény laspuertas del hades.Quecontinúe su estirpeenamorandoa los torpes,fértilespara la sinrazóndel amor enlos poemas.Y permitirledormir y soñarcon sueñospropios,rodar sobrelas calles vacías,desapareceren el río,correrlibre por el cielocomo unaniña(como laque fue)jugando conlas brujas,y viajaruna y otra vez,desnudavolviendo aser el amuleto de aguaentre los pescadores, los faros,los artistas, los besosde los amantes,y laslluvias frías que calmanla sed delverano.
Un saxotenor derrama parte desus secretos en su paseo,y ella ríesobre el Río de la Platahasta alborotarlo,sabiendoque volveráa vestirse de seday quedarseen las altas torres delsilencio, porquees lo queestá mandado.
Los hombresle han cantadodesde hacemilenios.Fuerontantos. Si pudiera recordar almenos en particular a uno, a ese quela dejó bajar poruna callede Buenos Airesrodando…Si pudierarecordarlo,y volver a bailar y bailar, con el almatranquilay dulce,llena de una balada.Bailar ybailar emocionándose,hasta caermuerta sobre el púrpurade los patiosincendiadosde pasión,y volverseloca, otra vez…loca…loca…