El punto débil de casi todas las mujeres es el abdomen. Son muchas las causas que hacen que se acumule grasa en esta zona y termine cediendo. Estos factores como las hormonas, las prisas, acumulación de gases, digestiones lentas, comidas pesadas, falta de ejercicio, etc. van inflando nuestro vientre a lo largo del día, ya que seguramente habras notado, que a pesar de levantarte con el estómago plano, al final del día este termina abultado.
Para que llegues a la noche con una estupenda figura y puedas lucir ese ceñido vestido que estabas reservando para una ocasión especial, debes eliminar la acumulación de gases y mejorar tu tránsito intestinal (las dos causas más comunes de la hinchazón de vientre).
Dile adiós a los gases: Si después de comer sientes que tu abdomen comienza a inflarse y sientes molestia, es que estás reteniendo gases. Soluciónalo con estos tips:
-Las plantas aromáticas como la albahaca, el cilantro, el hinojo y el comino, tienen propiedades antigases, utilízalas como condimento. -Masticar chicles y caramelos ocasiona que tragues más aire, lo que provoca gases.-Evita el consumo de bebidas con gas y no uses pajitas. -Bebe infusiones de hinojo y de anís verde o estrellado, ya que tienen propiedades desinflamatorias, además de un delicioso sabor. -Intenta comer tranquilamente sin abrir excesivamente la boca. Al masticar se ingiere aire, por lo que si se hace rápido y sin control aumentan los gases.
Mejora tu tránsito intestinal: Con el frío pueden aumentar los casos de estreñimiento, debido a que se bebe menos agua que en verano. Si quieres evitarlo, toma nota:
-Incluye más fibra en tu dieta, a través de alimentos integrales, como arroz o pasta y semillas, como las de lino o amapola, en tus menús, además intenta beber dos litros de agua al día y consumir yogures con bífidus. -Evita el exceso de proteínas (carnes, embutidos, etc), la comida rápida y los alimentos refinados (pan blanco, bollería industrial). -Opta por infusiones de ortiga, que ayudan a mejorar las digestiones pesadas y tiene un suave efecto laxante.
Fuente: Revista Clara Nro. 206