Veamos cómo cualquier persona con vocación en la escritura puede hacerlo, nada más hay que trabajar en el poema al menos varios días, o varias semanas, de tal manera que siempre un autor tiene unas 2 versiones de un mismo poema, hasta que se decanta por una versión. En mi afán por no perder ni un sólo boceto de escritura, guardo en mi memoria todas las versiones de un mismo poema.
Eligo el poema sobre el Cielo, pues tengo tantas versiones que nunca acabo de saber cúal es la buena y finalmente siempre me decido por la más positiva.
Primera versión de un poema sin rima:
"Cielo, tierra,
luna, sol,
todos somos
uno,
todos somos
Creación."
Segunda versión del poema, pasado a Haiku, pero con cadencia 5, 7 ,5 sílabas en cada línea:
" Cielo y tierra,
todos seremos uno,
todos somos Dios.".
Finalmente, me decanté por el segundo poema, dado que es más lo que quiero hacer significar, que todos somos parte de la Creación, que todos formamos parte de Dios.
Tal vez hoy día no hay muchos creyentes, pero haberlos haylos, como las meigas.