Como son los sagitarios, los signos del zodiaco

Publicado el 11 diciembre 2012 por Jocoma171212


















Signo de Sagitario son los nacidos entre el 23 de Noviembre al 21 de Diciembre.

Los Sagitarios son los jugadores del zodiaco.

El Símbolo de sagitario es "El Centauro" representa la añoranza de trascender su parte animal a su parte humana.
El Planeta regente de este signo es Júpiter.
El sociable sagitario es un elemento de Fuego es un ser optimista y se orienta siempre hacia sus objetivos, con tendencia a las casualidades y propenso a el amor.
Los colores que más le llaman la atención son los azules oscuros y los marrones cálidos.
Las piedras que se le asocian son los Rubís, los jacintos y los topacios.
El metal es el estaño.

La flor de este signo es el clavel.


Encontrar un ejemplo de este signo solar es muy fácil. Ves a cualquier fiesta y mira en el centro del grupo más bullicioso. ¿Ves el tío ese que esta ahí sentado alegremente con un enorme pie metido en la boca? Es un Sagitario que acaba de meter verbalmente la pata, pero todavía no lo sabe. Cuando se dé cuenta se mostrara un tanto perplejo y los que le rodean le mirarán con odio.
El arquero es capaz de acercarse, darte una cordial palmada en la espalda y sonreírte amistosamente. Después, te saludará con un comentario ofensivo y luego Sagitario seguirá con su brillante sonrisa, pero la tuya habrá empezado a marchitarse un poco. A él le costará un rato darse cuenta de que fueron sus palabras las causantes de tu seriedad, y más tiempo aún necesitará para entender por qué. Entonces procurará explicarse. Trata de mantener la calma, porque la explicación será peor. Tras haber explicado cuidadosamente sus meteduras de pata verbales, y conseguido que tú volvieras a sentirte bien, Sagitario seguirá alegremente su camino, silbando un tema del último éxito. Cuando volváis a encontraros y tú e demuestres frialdad, se sentirá dolido e intrigado. Con él, de nada sirve enojarse ni molestarse; Sagitario no actúa por maldad. Sus exabruptos verbales son fruto de la más absoluta inocencia y, por lo general, tampoco entiende que cuando trata de arreglar las cosas resulta ofensivo además de hiriente. No le juzgues con dureza, porque está animado de buenas intenciones. Tampoco necesita tu compasión. Bajo su falta de tacto hay una mente sumamente despierta y de principios elevados. Su peculiar combinación de ingenio, inteligencia y fogoso impulso lleva por lo común al Arquero directamente al círculo de los vencedores. Lo realmente fastidioso es que para la gente de este signo, hombres o mujeres, su torpeza verbal es inconsciente; están convencidos de que son los seres más diplomáticos del mundo. Siempre dicen que son incapaces de herir los sentimientos de nadie y que ponen gran cuidado en no hacerlo, y lo creen sinceramente. Es más, todo lo que hacen lo hacen sinceramente. Cualquier forma de fraude y engaño les produce una gran consternación.
La gente Sagitario es normalmente inquieta; no pueden estar sentados o quedarse quietos. Físicamente, el no pasa inadvertido, aunque sólo sea por su evidente confianza y su desdén del comportamiento convencional.
Por lo general, la gente nacida bajo la influencia de Júpiter no teme a nada. Al Sagitario típico le atrae el peligro, ya sea en el deporte, en su trabajo o en sus pasatiempos. Para el Arquero, un elemento de riesgo significa excitación y desafío. Les encanta la velocidad; los coches veloces, los aviones, la montaña rusa, incluso ejercen sobre ellos una atracción magnética. Los más temerarios pilotos de pruebas suelen ser Sagitarios. Al jupiteriano medio nada le proporciona tanto placer como salvarse por un pelo, en cualquiera de sus variantes, ya sean emocionales o físicas; le resulta euforizante.
Sagitario es totalmente inconsciente del efecto que producen sus palabras, palabras que pronuncia bajo el impulso de su honradez compulsiva. Los regidos por Júpiter se sienten abrumados y desolados por su propia falta de discreción, cuando descubren que han herido realmente a alguien. Resultarían conmovedores, si no fueran tan irritantes. Lo que el Arquero piensa y siente, lo dice en forma casi inmediata, con la franqueza y seriedad de un niño de seis años. Si quieres la verdad, pregúntale a Sagitario. Es difícil estar durante mucho tiempo resentido con el Arquero, siendo tan patente su falta de mala intención. A estos idealistas encantadores e inteligentes se les encuentra en cualquier momento en casi todas partes.
La mayoría de los Arqueros procuran sinceramente levantarte el ánimo. Por lo menos, empiezan con esta intención, pero a veces se les convierte en un adoquín más en el camino. Sagitario puede salir con una declaración sensacional que realmente te levanta el espíritu y te compensa todo lo demás. Son capaces de ofrecer consejos profundos y sabios, cuando uno se toma el tiempo de analizar sus opiniones. Como Sagitario es signo de fuego, la mayoría de los Arqueros son extrovertidos, charlatanes y directos. Los Sagitarios tranquilos y de modales apocados son capaces de los sueños más grandiosos y de apuntar a las metas más altas.
Casi siempre, el Sagitario típico es feliz y gregario, pero su temperamento puede estallar coo un cohete si se siente importunado por gente que abusa de su forma de ser naturalmente amistosa o se toma demasiada confianza con él. También son habituales las rebeliones contra la autoridad y contra una sociedad opresora. Sagitario jamás escurrirá el bulto ante una pelea o una petición de ayuda. Las mujeres son capaces de perder su disposición normalmente agradable para atacar con la cortina de fuego de un discurso inesperadamente serio que ponga en su lugar a los impertinentes. Los hombres se valdrán de sus puños, desdeñando las armas.
Los gallardos hijos de Júpiter no pueden soportar que se les acuse de fraude. Una acusación injusta que ponga en tela de juicio su integridad hará arder con fiereza su indignación, pero después de sus orgullosas demostraciones temperamentales, el Sagitario típico sentirá remordimientos y pedirá disculpas.
Los hombres y mujeres de Júpiter poseen una fuerte vena religiosa, especialmente en su juventud. Se interesan muchísimo por los asuntos de Iglesia, pero a medida que maduran pueden volverse escépticos ante lo dogmático, inclinándose a cuestionar su antigua fe y tendiendo a buscar la perfección de sus valores.
Siempre observarás un aire un poco infantil en el Sagitario típico, ingenuo, bravo y optimista. Se niega a aceptar la seriedad de la vida, aunque hay algunos que en sus últimos años afrontan de forma admirable la responsabilidad.
Tanto los tímidos como los enérgicos sabrán aprovechar en cualquier momento las oportunidades amorosas; sagitario se entrega al romance con temerario abandono, pero es frecuente que cuando se hable de matrimonio se detenga súbitamente en seco; lo piensa bien antes de seguir adelante, y mate la pata después de hacer cuidadosas consideraciones. Aunque en las relaciones amorosas el Arquero es cálido y afectuoso, resulta bastante esquivo a la hora de dejarse atrapar.
Sagitario jamás puede tener éxito como mentiroso; nadie le cree ni media palabra. Para él es siempre mejor decir la verdad y dejar que las cosas salgan como salgan.