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CONCURSO DE RELATOS 34ª Ed. ¿SUEÑAN LOS ANDROIDES CON OVEJAS ELÉCTRICAS? DE PHILIP K. DICK

Publicado el 04 diciembre 2022 por David Rubio Sánchez
CONCURSO DE RELATOS 34ª Ed. ¿SUEÑAN LOS ANDROIDES CON OVEJAS ELÉCTRICAS? DE PHILIP K. DICK
¡Bienvenidos a una nueva edición del concurso literario de El Tintero de oro! Suena un ritmo percutido. Es repetitivo e hipnótico y coronado por el látigo instrumental; ese instrumento antiguo formado por dos maneras planas unidas con una bisagra en uno de los extremos. De pronto, se superpone una misteriosa y poderosa fanfarria de vientos de metal completando una melodía que ahora es bien reconocible: la banda sonora de Desafío total compuesta por Jerry Goldsmith hace casi un siglo.    Sí, compañeros. Estamos en el bellísimo y esperanzador año de 2082, la polución ha convertido al Sol en una bola grisácea, la riqueza se mide por la cantidad de superzettabytes que puedas gastar en redes y la inflación es un ascensor robótico y psicópata que distribuye alucinógenos de curso legal y se lleva a todo antisocial al centro de la tierra...    Bienvenidos al:

CONCURSO DE RELATOS 34ª ED. ¿SUEÑAN LOS ANDROIDES CON OVEJAS ELÉCTRICAS? DE PHILIP K. DICK 

Bueno, no os asustéis; la realidad sigue siendo la que tenemos. Quizá me vine un poco arriba con la intro, pero es que, como dice Jorge Barriuso, las novelas del autor al que homenajeamos atacan al cerebro como una de esas pesadillas de la que quieres pero que no puedes escapar.
«La Realidad es aquello que, incluso aunque dejes de creer en ello, sigue existiendo y no desaparece»
    Visionario, tanto de manera metafórica como real, Philip K. Dick fue un maestro de los mundos alternativos y uno de los autores más influyentes dentro de la ciencia ficción científica. En sus novelas, los personajes cuestionan su propia realidad o creen que sus mentes viven atrapadas en una simulación donde solo una fina capa separa lo real de lo ficticio. Un juego constante en el que trata de confundir al lector sobre lo que es cierto y lo que no; que este no esté seguro de si los personajes son entes de carne y hueso, máquinas o si la realidad percibida a través de la lectura es algún tipo de alucinación, espejismo o delirio. Su obra resulta hoy tan poderosa y sugestiva como en el momento de su publicación. En ella, a diferencia de muchas obras de ciencia ficción, plantea, más que la visión de un posible futuro, qué es eso que nos hace humanos.

Philip K. Dick, el hombre simulado

«El cuerpo tiene poderes que la mente desconoce»

Acosado por problemas mentales y por el consumo desenfrenado de drogas, el propio Dick declaró en una convención de ciencia ficción que creía que su existencia era una simulación y que era capaz de verse a sí mismo en diferentes realidades. De hecho, toda su vida fue un cúmulo de obsesiones, trastornos, intentos de suicidio junto con relaciones complejas con las mujeres.
    Hijo de Dorothy Kindred Dick y Joseph Edgar Dick, nació el 16 de diciembre de 1928, con mes y medio de adelanto, junto con su hermana melliza, Jane Charlotte Dick. Cinco semanas después, su hermana falleció, al parecer de malnutrición. Muerte que le afectaría durante toda su vida viéndose reflejado en su obra.
CONCURSO DE RELATOS 34ª Ed. ¿SUEÑAN LOS ANDROIDES CON OVEJAS ELÉCTRICAS? DE PHILIP K. DICK
    Ya desde niño mostró una inteligencia por encima de la media ligada a la agorafobia; patología por la que comenzó a consumir fármacos desde su adolescencia. Cursó estudios básicos en la Escuela Primaria John Eaton desde 1936 hasta 1938, obteniendo la peor nota, dato curioso, en redacción.
    En junio de 1938, madre e hijo volvieron a California. Allí fue al instituto de enseñanza secundaria de Berkeley; él y Ursula k. Le Guin fueron alumnos de dicho instituto en la misma promoción, aunque no llegaron a conocerse. Tras terminar la secundaria, pasó una breve temporada estudiando en la Universidad de California, pretendiendo especializarse en alemán, aunque abandonó sin terminar. Esto se debió a su negativa a seguir el curso del Reserve Officers Training Corp.
    Fue aquí donde su malditismo se fue nutriendo con la adicción a los alucinógenos y a las anfetaminas y a sus cada vez más frecuentes episodios esquizoides. Algo que recuerda a parte de las vivencias de la película Skanner Darkly, basadas en su novela Una mirada a la oscuridad.
    Durante el tiempo que pasó en Berkeley, Dick trabó amistad con el poeta Robert Duncan y fue presentador de un programa de música clásica de la emisora de radio KSMO en 1947. Desde 1948 hasta 1952 trabajó vendiendo discos, el único trabajo antes de publicar su primera historia corta, Beyond Lies the Wub, en 1952. A partir de entonces, comenzó una prolífica carrera de escritor casi a tiempo completo, publicando su primera novela, Solar Lottery, en 1955.
CONCURSO DE RELATOS 34ª Ed. ¿SUEÑAN LOS ANDROIDES CON OVEJAS ELÉCTRICAS? DE PHILIP K. DICK
    El reconocimiento de la crítica le llegó a Philip K. Dick en 1963, cuando ganó el Premio Hugo por su novela El hombre del castillo. Aunque Dick fue entonces aclamado como un genio en el mundo de la ciencia ficción, siguió siendo un desconocido para el resto del mundo literario, por lo que solo pudo publicar sus libros en editoriales especializadas que pagaban poco. En consecuencia, aunque publicó novelas regularmente durante los siguientes años, siguió teniendo dificultades económicas casi hasta el final de sus días.
    En el ámbito personal, Dick no se limitó solo a plantear este tipo de intrincadas tramas en sus novelas, sino que llegó a desarrollar tales cuestiones en la vida real. Provocó entre sus amigos y esposas una duda permanente, hasta el punto de que estos ya no sabían dónde terminaban las bromas y el humor absurdo tan característicos de Dick y dónde empezaba el terror y la alucinación. La paranoia fue en aumento hasta cotas inimaginables. Llegó a creer que el FBI lo espiaba. Y, por si fuera poco, tenía visiones reales que nadie entendía. Como cuando creyó que su hijo iba a morir de una hernia inguinal. Los médicos le decían que no veían nada, pero él no cejó hasta que, finalmente, la hernia apareció, y todo gracias a que nunca dejó de creer en su visión.
CONCURSO DE RELATOS 34ª Ed. ¿SUEÑAN LOS ANDROIDES CON OVEJAS ELÉCTRICAS? DE PHILIP K. DICK
    El 17 de febrero de 1982, al finalizar una entrevista, Dick se puso en contacto con su médico quejándose de problemas de visión. Este le aconsejó que fuera a un hospital de inmediato, pero no le hizo caso. Fue encontrado al día siguiente en su casa en Santa Ana, California, inconsciente después de haber sufrido un derrame cerebral. Dolencias que fueron a más en el hospital y que le provocaron la muerte cerebral. El 2 de marzo de 1982, Philip K. Dick fue desconectado del soporte vital que lo mantenía con vida, cuatro meses antes del estreno de la película Blade Runner basada en su novela ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?, película que se convertiría en un icono de la ciencia ficción.

Los sueños de Philip K, Dick

«La herramienta básica para la manipulación de la realidad es la manipulación de las palabras. Si puedes controlar el significado de las palabras, puedes controlar a la gente que debe usar las palabras»

Gregg Richman, uno de los mayores cronistas de Dick, propuso un esquema con tres etapas para organizar su amplia obra:
  1. Etapa política (1951-1960), abarca desde los primeros cuentos hasta Confesiones de un artista de mierda.
  2. Etapa metafísica (1962-1970), desde El hombre del castillo, Ubik, ¿Sueñan los androides en ovejas eléctricas?, terminando en  Fluyan mis lágrimas, dijo el policía.
  3. Etapa mesiánica (1974-1981), hasta la publicación de La transmigración de Timothy Archer.

    Dick situó la acción de varias de sus novelas en el mundo ucrónico de Carolina del Norte. Su aclamada novela El hombre del castillo (1963 y serie que han estrenado hace poco) es una obra pionera que mezcla los géneros de la ciencia ficción e historia alternativa.
    Las obras de Philip K. Dick se caracterizan por una sensación de constante erosión de la realidad, explorando su naturaleza enigmática de forma sistemática y creando ambientes posmodernos y decadentes, adelantándose al subgénero cyberpunk. A menudo, los protagonistas descubren que sus seres queridos (o incluso ellos mismos) son, sin saberlo, robots, alienígenas, seres sobrenaturales, espías sometidos a lavados de cerebro, alucinaciones, o cualquier combinación de estos; este rasgo refleja la obsesión del autor acerca de la frágil naturaleza de la realidad perceptible. Sus historias se convierten en fantasías surrealistas a medida que los personajes van descubriendo que su vida diaria es realmente una ilusión construida por poderosas entidades externas, por grandes conspiraciones políticas o simplemente por las peripecias de un narrador no creíble.
    Obras que han influido no solo a la literatura sino también al mundo del cine. Como Scanner Darkly, Desafío total (Total recall), Paycheck, El hombre del castillo, Minority report y, la pionera de todas, Blade runner.

BLADE RUNNER

«Vosotros los humanos os conformáis con trabajos de mierda porque nunca habéis visto un milagro»
La dificultad de adaptar una obra de Dick al cine es tal que las película suelen beber de algunas de las ideas para trazar una trama parecida, pero distinta. Tenemos los Precog, (esos seres que ven el futuro), las drogas aún no inventadas, los escáneres de iris a nivel comercial, el tráfico de material psíquico, los replicantes... Blade runner también sufre de este mal. Así que si no habéis visto ninguna de las dos películas o no os habéis leído la novela estáis de suerte, pues son bastante diferentes.
    Como he dicho, los films beben de algunas ideas de la novela, en este caso la de esos replicantes, los animales eléctricos o ese método tan extraño y lógico de evaluar si un ente es androide o humano. Al contrario que en las películas, ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? es una historia distópica postapocalíptica, donde gran parte de la sociedad ha emigrado a Marte y los que quedan tratan de vivir con los estragos que ha dejado una tercera guerra mundial, o Guerra Terminal.
    En la historia, la radiación cae del cielo como una lluvia constante. A consecuencia de esta, las personas que se quedaron en la Tierra pueden padecer defectos genéticos. A los afectados se les denomina «especiales», ya que no piensan con claridad o no pueden desarrollar trabajos normales. Es por eso que la tecnología ha llegado al punto de poder desarrollar androides orgánicos para que sirvan en las colonias.
    Algunos de estos nuevos androides, los Nexus 6, han sido creados y desarrollados con unas características tanto intelectuales como corporales similares a las humanas, por tanto solo pueden ser detectados como androides por una máquina, con el método Voigt-Kampff, que es el que utilizará nuestro protagonista, Rick Deckard, en la búsqueda de los androides rebeldes.
    Por otra parte, está la apuesta filosófica. El mundo va la deriva. La vegetación ha menguado. Tener un animal real se ha convertido en un signo de alta distinción, pues casi todos han muerto por la radiación. Y aquí llegan las ovejas. Animales que aguantan la radiación y que no son muy costosas de mantener. La gente destina grandes sumas de dinero por tener una, pues quieren conservar algo que les recuerde que siguen vivos. De hecho, el título de la novela es una humanización de los androides hacia una de las pocas cosas que quedan de la anhelada vida anterior; y es que, en realidad, ¿qué es lo que nos hace humanos?

CONCURSO DE RELATOS

Podéis participar en este homenaje a ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? de Philip k. Dick con un relato futurista donde androides y humanos forman parte de un mismo entramado social... o no. La extensión no podrá superar las 900 palabras.
Como ya sabéis existen dos modalidades:
  1. La modalidad concursoel plazo para participar es del 4 al 18 de diciembre y una vez finalizado deberéis enviar las correspondientes votaciones de acuerdo con las bases que aparecen más abajo.
  2. La modalidad fuera de concurso: el plazo es del 19 al 29 de diciembre y solo se trata de compartir vuestro relato con el resto de compañeros para su disfrute.
Por supuesto, también podéis participar con vuestras reseñas de la novela, del autor o de las adaptaciones cinematográficas. Podréis hacerlo a lo largo de todo el mes de octubre.

BASES DE PARTICIPACIÓN del CONCURSO DE RELATOS:


Tema: un relato futurista donde androides y humanos forman parte de un mismo entramado social... o no.
Extensión: Máximo 900 palabras.
Plazo: Del 4 al 18 de diciembre de 2022.
Participación: Abierta a todo el mundo. Eso sí, deberéis contar con un blog donde publicarlo y añadir el enlace en los comentarios de esta entrada. Los únicos que no pueden participar son Pepe de la Torre, como organizador de esta edición, Isabel y Carmen, galardonadas en la pasada edición, y David Rubio, como receptor exclusivo de los votos.
Votación: Los autores participantes deberán votar siete relatos otorgando siete puntos al que más os guste; seis, al segundo; y así sucesivamente. Se enviarán por correo electrónico a [email protected] del 19 al 28 de diciembre. No enviar los votos supondrá la descalificación del relato.
Premios: El 30 de diciembre se celebrará la Gala de Premios anunciando los ganadores. Los tres primeros relatos recibirán un diploma digital acreditativo del mismo.

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Utiliza si quieres esta imagen acompañando a tu relato


RELATOS EN CONCURSO (Convocatoria abierta del 4 al 18 de diciembre):

1...

RELATOS FUERA DE CONCURSO (Del 19 al 28 de diciembre):

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OTRAS PARTICIPACIONES:

1...  

¡Saludos tinteros!

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