Confesiones II

Publicado el 09 marzo 2012 por Laninamariposa

Me gustaría saber como empezarías tú a escribir esto, 
El caso es que me gustas, me gustas desde hace un montón de tiempo.
Cuando te vi por primera vez, tu cara me pareció agradable.
Pero no fue eso lo que despertó en mi este calor salvaje que hace que piense en quererte dentro por momentos, momentos que se hacen largos, a veces hasta me quedo sin respiración y me llego a angustiar.
Todo el deseo de sexo me lo provoca tu acento y el olor a verano y a cerveza.
Y quizás yo sea un ser extraño, raro para ti.
Pero también sé que te gusto, que nos gustamos.
Porque cuando nos cruzamos por esa calle y me saludas,
Todo se vuelve lento, nuestros ojos se clavan en zonas  erógenas, 
Yo miro tu cuello,
Y tú, tú miras mi boca, 
mis labios anaranjados y húmedos que se entreabren pidiendo clemencia ensordecida.
Y nadie me lo ha contado pero yo sé que alguna vez en este montón de tiempo,
Hemos pensado en follarnos al unísono.
Lo hemos pensado a la vez, inevitablemente.
Y que era fabuloso.
Siempre.
Pero eres más pequeño...
Otra vez los remordimientos de la puta edad.