Datos técnicos
Título: Contra las cuerdas
Autor: Susana HernándezEditorial: AlrevésPrimera edición: Septiembre de 2.012
Sinopsis
Santana y Vázquez se enfrentan a un violador y asesino en serie que actúa en la Costa Dorada y la ciudad de Barcelona. La sexta víctima del asesino es alguien del entorno más cercano de Santana.
La complejidad del caso, sus implicaciones emocionales y la carrera desesperada por salvar a una persona querida no son los únicos obstáculos que deberá sortear la subinspectora.
Conflictos sentimentales, un misterioso acosador y un giro inesperado en la complicada relación con su madre, acorralarán a Santana contra las cuerdas.
Humor, acción, misterio y peripecias personales de las protagonistas, forman el fresco de esta nueva entrega.
Autor
Nació en Barcelona. Estudió Imagen y Sonido e Integración Social y compagina estudios de Investigación Privada y de Psicología en la Universidad de Barcelona. Ha colaborado en varios medios de comunicación escritos, ejerciendo como crítico musical y redactora de deportes, así como en medios radiofónicos, y, actualmente, imparte cursos literarios y colabora en distintos medios como crítica literaria y redactora.
Ha publicado la novelas:La Casa Roja(Premio Ciudad de Sant Adrià 2.005),La puta que leía a Jack Kerouac (2.007),Curvas Peligrosas (2.010), que ha sido considerada por Lorenzo Silva una de las tres mejores novelas negras publicadas en 2-010, y el libro de relatosEnamórate(2.012) junto a otros autores. Asimismo, sus relatos y poemas han sido incluidos en diferentes antologías y publicaciones literarias.En su haber cuentan diversos premios de novela, relato y poesía: I Premio Poesía Lésbica Versales 2.009, Finalista Premio de novela Katharsis 2.009, I Premio Ciudad de Sant Adrià de Besòs de Novela 2.005, Premio Contradiction 2.003, Premio Villa San Esteban de Gormaz 2.002, y Premio de relato «Mujeres» de Santa Cruz de Tenerife 2.001, entre otros.
Argumento
Rebeca Santana recibe una llamada telefónica en la que le comunican que ha aparecido una sexta víctima del "violador del cuchillo" y que la conoce personalmente.Esto, sumado a su situación sentimental (hace casi cuatro meses que ha roto con la pareja que conoció en la novela anterior), a que está recibiendo amenazas de un acosador y a la compleja relación con su madre, hacen que la vida de la subinspectora esté al borde del caos.
¿Quién es la sexta víctima?.
- —¿Han encontrado a otra víctima? —aventuró. Vázquez carraspeó al fin con tanta fuerza que tuvo que lastimarse la garganta. —Sí... —Hizo otra pausa infinita—. Pero no es una víctima cualquiera, Rebeca. —¿Qué quieres decir? —La conoces. —¿Qué? ¿Es alguien que conozco? —Las palabras se le pegaron al paladar. —Sí, alguien a quien conoces mucho —explicó despacio. —Me estás asustando, Miriam. —Lo siento muchísimo... —La voz de Vázquez flaqueó. Vázquez pronunció el nombre de la víctima número seis. Santana soltó el teléfono y vomitó en la alfombra. El viento volvió a abrir la ventana de par en par. —¿Rebeca? Rebeca, ¿estás bien? Estoy muy cerca de tu casa. Por favor, no te muevas de ahí. ¿Me oyes? ¿Rebeca? ¿Rebeca?.
- —¿Te lo puedes creer? —Blandió la nota escrita a ordenador que encontró en el asiento de la moto—. Hay un pirado acosándome. Si es que estoy de pega. —Déjame ver eso. Vázquez sujetó el papel por un extremo. La posibilidad de que hubiese huellas dactilares era remota, pero merecía la pena investigarlo. «Eres una cabrona, Rebeca. Te acordarás de mí.» —¿Sabes quién es? —Ni idea.
- Todo estaba a oscuras y en silencio. No había forma de calcular cuánto tiempo había pasado inconsciente. La sexta víctima se tomó el pulso. Palpó su cuerpo tratando de detectar los focos del dolor y contabilizar los daños. Probablemente tenía la nariz rota. La mandíbula tampoco encajaba del todo y escupía sangre. ¿Era de noche o de día? ¿Por qué no estaba atada ni amordazada? Muy sencillo: porque no tenía escapatoria ni nadie que la pudiera socorrer. Caminó por la estancia a ciegas, para hacerse una idea de las dimensiones. Era pequeñísima. Tardó un rato en aceptar que el hedor provenía de su propio cuerpo. Se había meado encima. Era asqueroso. La falta de ventilación aumentaba la concentración del olor hasta un extremo intolerable. Probó a respirar por la boca. ¿Cuándo vendría a por ella? ¿Le quedaban horas de vida o tal vez minutos? Se hizo un ovillo en un rincón y rompió a llorar.
- Según la información que me han pasado desde Delitos Sexuales, ese tío es del tipo que se denomina «violador por difusión». Son sujetos sádicos cuyo placer aumenta en función del terror que padece la víctima. —Hijos de puta. —Te leo textualmente para que veas hasta qué punto encaja: «Suelen infligir a sus víctimas navajazos en el vientre, fractura de la boca y mandíbula a puñetazos, penetración con objetos inanimados, quemaduras, extirpación de órganos, etcétera. Se excitan con imágenes de pornografía violenta».
Opinión personalComo ya comenté en la entrada anterior, en la que reseñaba una novela de esta misma autora, conocí este libro a través del blog de Kayena (gracias nuevamente, porque he pasado dos ratos estupendos con las dos novelas; y también porque apuntarme al reto, con el miedo que me daba, es una de las mejores decisiones que he tomado como bloguera)Y aunque Ana decía que ella no se había leído el primero y no había echado en falta nada, a mí me gusta seguir las series ordenadamente, porque si no tengo la sensación de que me estoy perdiendo algo.Ya he dado en otra entrada mi opinión sobre esta editorial, que está apostando por nuevos valores y los está convirtiendo en fenómenos literarios; Alrevés es un sinónimo de calidad y desde aquí mi más sincera enhorabuena.Como ayer reseñé la primera entrega de la serie, que puede leerse de manera independiente pero os perderíais muchas cosas, la entrada de hoy va a ser más corta, porque sería repetirme, aunque entre una obra y otra se nota la evolución de la forma de escribir de la autora, no en su estilo, que sigue siendo el mismo, en la complejidad de la trama y en la forma de crear tensión cortando los capítulos y cambiando de historia; por otro lado, la inserción de los flashforwards dentro del racconto aumentan aún más el suspense.En este caso, la portada sí que me atrae; es, para mi gusto, mucho más bonita que la otra; el título también me parece más interesante. Pero eso da igual, porque lo he comprado a tiro hecho, sin tener que valorar ninguna de esas dos cosas ni tampoco su sinopsis; me lo han dado todo bien mascadito.Ambientada también en Barcelona, un año y medio después de los hechos que suceden en Curvas peligrosas, la novela está estructurada en cinco partes tituladas, divididas a su vez en capítulos que tienen su correspondiente título también, y un epílogo.Está escrita en tercera persona con un narrador omnisciente, con un principio abrupto o in media res (la novela se inicia cuando ya se han producido muchos hechos relevantes de la obra, y la autora, utilizando un racconto, nos va contando lo que sucedió 14 días antes, 9 días antes, 5 días antes y 36 horas antes), con un estilo fluido, directo y sin florituras, y con un lenguaje cotidiano.
La trama está muy bien engarzada, con todas las diferentes subtramas encajando de un modo lógico, y su ritmo trepidante nos atrapa entre las páginas, convirtiéndolo en un auténtico page-turner, gracias a una intriga que va aumentado a lo largo de ellas y en la que nada, absolutamente nada, es lo que nos puede parecer a primera vista.Los personajes muy bien dibujados, aunque aquí la protagonista casi absoluta es Rebeca, por lo que he echado muchísimo de menos a Vázquez y sus borderías e ironías. El retrato psicológico del violador sádico (o psicópata o todo junto, no lo tengo muy claro) es asombroso.
Santana, emocionalmente inmadura, es, como bien la define Miriam en Curvas peligrosas, una JASP (joven, aunque sobradamente preparada), es inteligente, tiene instinto y, sobre todo eres muy humana. Vázquez, es irónica, mordaz, ácida, borde, cortante, pero una persona en la que se puede confiar; su vida personal es un desastre desde que se separó del padre de su hija, del que sigue enamorada, porque la engañaba con una compañera de trabajo; además, está premenopáusica, lo que hace que sus hormonas estén en ebullición. Los más entrañables, sin ninguna duda, son Navarro, el excompañero de Miriam antes de la llegada de Santana, y el abuelo materno de Rebeca, que la crió como un padre. Los escenarios y ambientes muy logrados, con algunas descripciones de las escenas de los crímenes brutales.La novela está llena de giros inesperados y su final no podía ser menos: es tan imprevisto como impresionante.Eso sí, para mí la historia termina con un cliffhanger, por lo que no sé si la autora continuará con el caso del "violador del cuchillo" o si la siguiente novela la dedicará al caso de asesinato del estudiante danés del que se habla en ésta.
- La gente inteligente cambia de opinión cuando es preciso; los necios se obstinan.
Valoración: 9,5
Leído el 5 de Febrero de 2.013