Conversaciones

El otro día estuve en Madrid. De nuevo en casa. Y estuve hablando con mis amigos. Y riéndonos de mi paso por la cárcel. Y estuve contándoles historias que ninguno de vosotros llegará a saber nunca. Y estuve llorando con ellos. Y fue cuando vi, de frente, lo que me había sucedido. Había estado en la cárcel. Había estado en uno de los sitios más infernales que se pueda imaginar en nuestra