Hoy, día 28 de mayo se celebra el Día Nacional de la Nutrición. Es la XI edición que promueve la Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética (FESNAD) con el lema “Enseñar a comer, es enseñar a crecer“ destacando la importancia de la adquisición de unos buenos hábitos alimentarios desde los primeros años.
¿Por qué esta temática?
Hace unos días se publicaron los resultados de un importante estudio realizado por la Fundación Thao: “Uno de cada cuatro niños de 3 a 5 años sufre exceso de peso en nuestro país”. En su informe queda claro que nos hemos desviado de la dieta mediterránea tradicional. Los cambios en los hábitos alimentarios y la disminución de la actividad física tienen la culpa.
Hablando claro, el sobrepeso afecta al 60 % de la nuestra población. No cabe duda que tenemos un problema.
¿Tiene solución?
Por suerte, la infancia es el periodo ideal para adquirir unos hábitos alimentarios saludables y poder mantenerlos a lo largo de nuestra vida, con lo que favorece la prevención de muchas enfermedades en edad adulta.
Por un lado, la escuela debe tener un papel importante. Y por otro, padres y abuelos deben ser un modelo dónde el niño aprenda con el ejemplo.
Pero… ¿Quién asesora a todos los implicados?
Aquí aparece el dietista-nutricionista como pieza clave. Si para arreglar el coche vamos al mecánico o para una caries al dentista… el profesional sanitario legalmente reconocido como experto en nutrición y dietética es el dietista.
A pesar del intrusismo profesional, yo soy optimista. Nuestra profesión se va consolidando. Y, sin duda, tenemos mucho trabajo por delante.
Por otro lado, como dietista-nutricionista de las primeras promociones en nuestro país me gustaría reconocer el aporte de otros muchos profesionales de la salud que, en los tiempos que no existía nuestro perfil profesional, aportaban su granito de arena en la educación nutricional.
¿Qué opinas tú?
Esta entrada participa en la 1ª Edición del Carnaval de Nutrición, puedes ver las demás aportaciones aquí.