Lo sé, lo sé. Sé que de este encuentro ya hace unas semanitas, pero que le vamos a hacer, soy un peeeeerro. Cierto es que el trabajo no ha ayudado.
Bueno, como de costumbre os voy a contar mi versión de los hechos de un día en el cual me enteré de algunas cosissshas interesantes y jugosas.
Todo comienza un precioso día 15 de Noviembre (mentira Sandman, de precioso tenía lo que tu de guapo y ocurrente, y además era tarde, una tarde lluviosa si no recuerdo mal)
¡Asco de conciencia! Ejem... Yo sé de uno que esta misma semana se va a leer libros guarrotes para pervertirte de una vez por todas...
...
Momento en que mi conciencia da saltos de alegría ante tal hecho.
Todos los chicos y chica de la sala: ¡MEGAAAAAN FOOOOOOXXX! Como para olvidarse...¡ AAAY OMÀ QUÉ RICA! Después de la charla de rigor, vino el momento de las firmas. Yo tó ilusionao como es normal, me voy a que la autora me firme mi ejemplar, y he de decir que estoy muy enfadado con la autora. Me prometió en su dedicatoria el número de teléfono de la prota, y a días de hoy todavía no lo tengo. Muy mal Olga, muy mal. Pese a su falta de consideración al no darme el número, la tarde fue la mar de divertida, como acostumbramos a pasarlas entre blogueros/as. ¡Ah! Y de lo que me enteré, comprended que no puedo decirlo, ssssshhh Es un secreto.