14 de abril, Ourense,Nos habíamos quedado con Alexandre, mientras degustábamos empanada y croquetas en un salón de la Universidad de Ourense. Hablamos de la obra de teatro y también de las complicadas situaciones laborales de los que nos dedicamos a la educación social. Las dificultades -sueldos, condiciones contractuales, funciones poco definidas, etc.- se repiten en toda España, aunque cada comunidad autónoma tenga grandes peculariedades. Creo que es una profesión en la que estamos avanzando mucho en todos los niveles, también en el de las condiciones laborales. Que nos atrevamos a incluir en nuestro discurso (¡por fin!) la necesidad de mejorarlas es también un síntoma de normalidad.En el pica-pica, algunos estudiantes escriben en nuestro diario de gira. Luego comprobaremos que son comentarios elogiosos sobre la obra. Lo de, "comprobaremos", es una forma de decir que Rafa y yo nos lanzamos al diario como fieras después de cada actuación, ansiosos de curiosidad. Nuestro diario existe desde que estrenamos en el Teatro Principal de Castellón, hace ahora dos años. Aunque no negaré que el ego está presente siempre en cualquier manifestación artística, no es el ego el motivo principal por el cual lo llevamos encima. Se trata de un complemento a la respuesta que el público te da en directo, cuando se ríen, o no se ríen, y aplauden más o aplauden menos. Otro complemento son los comentarios posteriores en facebook o twitter, aunque los del diario nos gustan especialmente porque están hechos en caliente. El público, para nosotros, es el crítico al que le damos más valor, por no decir el único. Respecto a los estudiantes he estado pensando (lo hago ahora, días después de Galicia) que incorporaré algunas propuestas de comunicación 2.0 (twitter y facebook básicamente) para que puedan interactuar con nosotros, si quieren, antes, durante o después del forum.
Volvemos a empaquetar toda la escenografía para enviarla de nuevo a Benicarló y luego nos vamos a cenar con Sofía, Laura, Fran (un amigo de Laura), y Xosé M. Cid, decano de la Facultad de Educación. Todo está exquisito, pero lo mejor viene con el postre. Fran nos recomienda que probemos la tarta de queso. Lo hace de una forma tan contundente que Rafa y yo pedimos tarta sin dudarlo. Cremosa, suave, se deshace en la boca. La mejor que he probado nunca. Acabamos la noche tomando algo por el casco viejo de Ourense. Rafa y yo pedimos un licor de hierbas que no acabamos. Estamos bastante fundidos y pensando en el madrugón para coger el avión del día siguiente.
15 de abril, Ourense-Santiago,Y el día siguiente llega muy rápido, lo justo para una ducha y un café con leche (aquí llamado doble o también desayuno). Laura nos lleva, esta vez en su coche, de Ourense al aeropuerto de Santiago.
Una azafata de Ryanair, en pleno vuelo, anuncia el comienzo de una lotería. Álgo así. La oigo mientras no sé si estoy despierto o soñando.
Fin
Foto1: Yo, Laura, Rafa y Sofía en el teatro del Campus de Ourense
Foto2: Rafa desmontando la escenografía.