Foto tomada durante la performance "Sense respostes" del baterista Ivo Sans y el bailarín Andrés Corchero en el MACBA
"Cuando en la vida llega el saber, a veces el espacio está ocupado por prejuicios, vivencias del pasado, por símbolos que, en lugar de poder interpretar de forma generosa, libre y amorosa, están llenos de jerarquía, de sometimiento, de interpretaciones que no son relaciones de tú a tú. En nuestra posibilidad infinita de llevar a cabo nuestro deseo, siempre en relación con los demás, hace falta deshacerse de los intermediarios. Hay que asumir el riesgo de vivir y hay que intentar potenciar qué es eso de ser una persona única en el mundo. La pregunta es: ¿quieres darle sentido a tu vida o quieres darle cosas a tu vida? ¿La orientas hacia ese motor de infinito que es nuestra finitud o la orientas hacia las cosas tratando de tapar un agujero que realmente es infinito? El amor no es conceptualizable, no es algo que puedas coger, no puedes hacerle el amor a una propiedad. Para mí el amor es relación de tú a tú, no jerárquica, y no sólo en el espacio espiritual sino en el espacio democrático. Nuestra sociedad es jerárquica, y es cierto que, cuando tienes a alguien al lado, nos cuesta mirarle de tú a tú, porque estamos llenos de prejuicios, de miedos. En cada momento de nuestra vida se nos plantea decidir o por amor o por miedo, y cuesta ponerse a la intemperie y no devolver la bofetada que te han dado. Reaccionar no es ser uno mismo, lo dice la propia palabra. Habría que romper esa cadena causal de una agresión, o de algo que podemos provocar nosotros mismos o que nos pueden provocar, y tener una actitud que contemple la diferencia, que cada uno esté en su sitio. Tiene que haber un horizonte común, de bien común, que nos pueda inspirar a todos y en el que todos quepamos, en el que no haya competitividad." Lidia Pujol para El Asombrario