SinopsisUna vez escuché susurrar a la abuela que era imposible que tú y yo fuéramos hermanas, nuestras diferencias, a ojos ajenos, parecían crear un abismo entre las dos. Pero eran precisamente nuestras diferencias las que nos complementaban. Estábamos unidas por un vínculo mucho mas profundo que el genético y ese vínculo debía ser puesto a prueba.
Prólogo
Mis ojos se cerraron una tarde de marzo. Recuerdo que ese día llovía. Siempre me había gustado la lluvia, y sé que aún hoy, un año después, intentas ignorar el sonido del agua cuando golpea con fuerza los cristales de las ventanas. Finges no sentirla cuando su murmullo húmedo llega hasta ti o cuando su frialdad atrevida asalta tus manos. La culpa todavía te devora y por este motivo yo vago como un fantasma, condenada a la inexistencia y a la soledad. Mi corazón late en tu pecho por mi propia decisión y mientras no lo aceptes, yo seguiré siendo un fantasma y tu un alma poseída por la culpabilidad. Por eso he decidido contar nuestra historia. Quizás recordar cómo era todo cuando aún estaba viva y los motivos por los cuales yo tomé aquella decisión te alivien el peso de la culpa y me liberen a mí de una vez y para siempre. Mírate en el espejo, acepta el reto de tu propia existencia y vive la vida que te fue concedida. Hazlo por ti y por mí. Esa será tu mejor muestra de agradecimiento por el regalo que te concedí.