cual tibio azahar aún perfuma
el muy fresco recuerdo de tu piel...
que fue para mi boca, dulce miel;
mas entre mis dos manos se me esfuma
un hasta luego resta y jamás suma,
es trago de amarga y triste hiel...
y hasta de mi se ríe cual infiel
un silencio mortal que me abruma
cual flor puesta al viento se desgajan
los infinitos huecos del querer
sincopado mi loco corazón
ya deja de latir... ¡Desolación!
mientras el amor ve desvanecer
los besos que a la nada ciegos viajan...