¿Habrá algo que más preocupe a un fotografo aficionado (e incluso a algún "profesional") que tener la mejor cámara del mercado? La sociedad de consumo en la que vivimos trata por todos los medios de hacer creer al usuario que necesita más megapíxeles, objetivos más caros, capacidad de grabar video o de no tener ruido digital a iso1.000.000 ¿es todo eso necesario?
A día de hoy cualquier cámara de gama media-baja realiza mejores fotografías que cualquier gama alta de hace 5 años, y mucho mejores que las de carrete de hace una década. Entonces ¿para qué comprar siempre el último modelo?
Las fotos las realizamos los fotógrafos, sabiendo iluminar, retocar, dirigir al equipo y a la modelo. La cámara no hace absolutamente nada artístico, cuando te gusta el trabajo de un fotógrafo, preguntarle qué cámara tiene con la intención de comprarla es pensar que comprando la guitarra de Slash podrás tocar y componer como él.
Una cámara más moderna puede darte más resolución o menos ruido a isos altos, pero no te hará profesional ni conseguirá que hagas fotos más bonitas.
La fotografía de la derecha del ejemplo está realizada con la cámara de un teléfono I.Phone. La de la izquierda con un equipo de más de 6.000 euros.