Vino a mi para que le escribiera la historia más bonita que habían vivido sus ojos.
¿Qué querías que hiciera?Vino a mi.
Solo quería contarme su historia;
que yo pintara sus palabras,
y que él fuera el príncipe que salvara a la princesa de las
garras del dragón.
Según él, ese siempre eras tú.
Pero en este caso, no hizo falta que luchara contra ti,
porque ya no protegías la torre de mi corazón.
ni siquiera custodiabas mi cuerpo
¿Cómo iba a negarme?
Ahora que me encontraba en la torre de nadie.
Sabes que me encanta imaginarme historias y escribir sobre ellas.
No me quedó otra.
O fui yo, que no quise otra.
Me pidió que le escribiera la historia más maravillosa que nunca había oído...
Se empeñó tantísimo...
Que acabó transformándome a mí
en la protagonista de la historia de amor más absurda de todas.
Fuimos FELICES,
y joder si lo fuimos
nos comimos entre
LOS DOS.
Y las perdices terminaron comiéndose hasta tus huesos,
mi querido dragón.
Alejandra Muñoz