Después de hacer muchas cábalas creo que por fin sé cuando se fraguó el blog. Fueron muchos os intentos antes de conseguirlo. Lo creaba y cuando volvía a buscarlo había desaparecido. En principio se iba a llamar La fábrica del universo.
Fue la casualidad la que hizo que cansada de tanto error hiciera un blog llamado Athalia la lía. Surgió porque en esos días soñé que se lo enseñaba a un amigo y se llamaba así. ¿Crees en las señales?
Pues hoy cumple diez añazos con ese nombre. El motivo por el que lo abrí fue porque mandé un relato a una editorial y me dijeron de publicarlo y el blog creí que sería el modo de encontrar lectores.
Además de seguir escribiendo más relatos para crear un antología de cierta calidad y no de mil palabras. Ahora estoy volviendo a editar Ilusiones prestadas y lo empiezo con ese relato: Echadas a suerte.
Tampoco me pidáis que os explique el relato, también fue un sueño. Creo a Freud le resultaría interesante. Tengo pendiente terminarme La interpretación de los sueños que es un tema que me da mucha curiosidad.
He podido comprobar que hoy se celebra el Día internacional del escritor y justo era lo que yo buscaba al abrir este medio. Sí, medio porque mi intención nunca fue ser blogger. Mi meta era la de escribir, como indiqué al principio.
En la sección Mi pluma podéis ver como a lo largo de este tiempo he colaborado con varias antologías y ya son dos los libros que he autopublicado. Así que puedo decir que he conseguido lo que buscaba.
Debo de estar agradecida a mi pequeña Athalia la lía porque me ha hecho vivir muchas experiencias, dado la oportunidad de hacer bastantes cursos online, colaborar con plataformas, ser correctora en editoriales y lo que soñaba: publicar.
Lo que no podía imaginar que esto fuese algo más que escribir en una plataforma y se vinculara al mundo afectivo. He conocido a gente que admiro, que siguen a mi lado, otras se difuminaron con el paso del tiempo y otras fallecieron.
De todas me llevo un aprendizaje y no me arrepiento del tiempo que pasé junto ellas o ellos o elles. Los tiempos cambian y nosotros con ellos. Después de un parón forzado, en el que intentaba seguir y los callejones se cerraban… Me gustaría volver.
Durante estos dos años que apenas he actualizado el blog, no he dejado de apuntar ideas de post en un cuaderno que me gustaría compartir con vosotros. Eso debe significar algo, ¿no?
Para mi es importante llegar a vosotros a través de mis letras, donde creo que alguien se puede sentir identificado. Aunque parece que han ganado las redes sociales, creo que la magia de los blogs continúa.
Recuerdo que el libro de Jojo Moyes un adolescente decía que los blogs eran para señoras que tenían gatos o algo parecido. Prometo buscarlo en mi estantería. Aquí una señora («infantoloide») que mientras escribe este post tiene un gato en su regazo.
Así espero que sigas ahí porque vienen muchas cosas, crucemos los dedos.