No sé qué tipo de preparación emplea antes de lanzarse al juego. Yo le recomendaría un poco más de estudio, pues anda el mundo lleno de corazones rotos, desgastados, perdidos y ya es hora de darles un respiro.
De ser yo Cupido, consultaría el "vademécum" dónde fulanita y fulanito han descrito con todo lujo de detalle con quién desearían emprender el rumbo. Garantizadas más probabilidades de éxito sin duda.
Mientras tanto, habrá que seguir "capeando" obstáculos a la vez que encomendarnos a la misericordia de este "pequeño ser" que nos ronda.