De un lugar llamado vacaciones

Publicado el 16 agosto 2010 por Mamareciente
Da igual cuánto duren, al final siempre se pasan volando. Las vacaciones han sido geniales, pero ya se terminaron y a parte de la "dureza" de la vuelta al trabajo, lo peor para mí es separarme de mi Chiquinini. Y para él , claro.... Después de dos semanas intensivas de estar juntos, papá, él y yo, jugando a todas horas, volcados en él...ahora hay que volver a separarse. Lo llevo bastante mal.  Pero voy a intentar alejar mi mente de esos pensamientos y quedarme con lo bien que lo hemos pasado.
Hemos disfrutado un montón, pero hay que ver lo marcadas que están las vacaciones en nuestra vida, igual que otros periídos, como pueden ser los fines de semana. Da que pensar.
Tanta trascendencia le damos que "¿Qué será eso de las vacaciones?", debía pensar el Chiquinini justo antes de que las comenzáramos. ¿Por qué me hablan todos de eso? Y se despediden de mí los tios y abuelos, y en la guarde, y en todas partes me desean felices vacaciones. Y papá y mamá también me lo repiten a menudo; mañana nos vamos de vacaciones.¿?
Total, que cuando salimos de viaje cargados con los achiperres de la playa, rumbo al norte esta vez, al cabo de unos pocos minutos de trayecto, nos preguntó el Chiquinini:
-¿Ya estamos en vacaciones? ¿Es aquí vacaciones?
Cómo explicarle que no se trataba exactamente de un lugar.
Pues lo dicho, ya estamos de vuelta!