Foto extraída de Photo pin
Desde que el cine comenzara a conebirse como un espectáculo que busca entretener a una multitud de personas, ha buscado historias con las que nutrirse, historias para poner ante nuestros ojos en multitud de lugares. Una de las fuentes de inspiración de las películas han sido y sigue siendo, la literatura. Creo hemos visto infinidad de películas basadas en novelas y por supuesto, una vez que las películas han tenido éxito también hemos tenido la posibilidad de leer los libros que en principio podían haber pasado desapercibidos.
Sin pensar demasiado seguro que se os vienen al menos diez títulos de películas a la cabeza, que estan basadas en la obra de... Os voy a poner una lista, para que veáis que es cierto: Jurasic Park; El Señor de los Anillos; el Hobbit; Blade Runner; Desayuno con Diamantes; Orgullo y Prejuicio; Sentido y Sensibilidad; A Sangre fría; Matar a un ruiseñor y el Capitán Alatriste. No diréis que la lista no es variada... Cuando vamos a ver este tipo de películas corremos un riesgo: que decepcionen nuestra lectura. Seguro que os habéis dicho en más de una ocasión, aquella frase que ya resulta casi un tópico de " a mí me gustó más el libro". ¿Por qué?, ¿por qué nos suele gustar más el libro? Las razones que se me ocurren son variadas:
- Por un lado, la película comprime en poco más de dos horas (excepción hecha de las trilogías) una obra que normalmente es más extensa, más completa, a veces más compleja. La película tiene otra serie de medios para suplir esa extensión, sin embargo, en ciertas ocasiones no emplean con acierto. Las series o las trilogías pueden superar la limitación que supone la duración estándar de una película. Se me viene a la cabeza por ejemplo la serie de la BBC de Orgullo y Prejuicio o la trilogía de El Señor de los Anillos...
- Por otro lado, cada uno de los lectores de ese libro que se lleva a la pantalla, ha leído la historia previamente y se ha dejado arrastrar por ella. Ha invertido bastante más de dos horas en leerla y ha construido el relato que en su día le presentase el autor a su imagen y semejanza. El lector ha imaginado acciones, personajes, lugares, olores, sensaciones. En definitiva, el lector se ha apropiado de la novela hasta hacerla suya y le resulta conflictivo dejarse llevar por la versión de otro que puede o no coincidir con la suya.
Sin embargo, no siempre resulta ganadora la novela frente a la película, en muchas ocasiones el director ha sabido extraer, modificar o plasmar el mundo que refleja la novela con mucho acierto, tal vez ha quitado esos párrafos que nos parecían farragosos y detenían nuestra lectura y lo ha hecho con tanto acierto que acabamos reconociendo aunque sea en bajito que en ese caso nos gustó más la película que la novela. Ahora es cuando voy a mentir y diré que me gustó más Blade Runner que Sueñan los androides con ovejas mecánicas. ... en serio me gustó mucho la versión del Señor de los Anillos de Peter Jackson, los puristas dirán que no, pero a mí me entretiene más que el libro ( y os aseguro que la leí un montón de veces).
También puede suceder que te quedes indeciso, que encuentres tanta satisfacción en la película como en la novela porque son obras tan diferentes entre sí que resulta compleja la comparación, a mí me sucede con: A sangre fría, Desayuno con diamantes, Matar a un ruiseñor.
Y a vosotros ¿qué os gustó más la película o la novela? ,¿cuando habéis disfrutado como unos locos con la película?
P.D. El domingo que viene una entrevista muy especial... misterio, intriga. Un consejo, no os la perdáis.